#EntreAmigos Hernán Hamame - Periodista deportivo

Buenos días, Hernán, llámame. ¿Cómo estás? ¿Cómo estás, Roberto? Abrazo grande el gusto de charlar con ustedes.

El lunes siempre es una página más de ese viejo periódico que se leía de atrás para adelante, Roberto, que tantas veces hemos hablado, donde nos encontramos con lo deportivo.

Vaya si es noticia todo lo que ha pasado este último fin de semana.

Desde el arrastre de la congoja, del dolor del fútbol, con relación a lo que también hemos hecho referencia permanentemente, aquella situación de Miguel Ángel Ruso.

Yo debo ser honesto, Roberto, después nos metemos en la derrota de River y todo lo que ha dejado el fútbol de este fin de semana.

Pero te acordás que debatíamos mucho con relación al comportamiento del entorno de Boca, todo el contexto Boca, con Riquelme a la cabeza, con la familia de Miguel Ángel Ruso, con la postura de Miguel Ruso con relación a querer seguir en el trabajo, más allá de lo que uno veía en el deterioro.

Y uno hasta con cierta arbitrariedad se animaba a sacar algún tipo de conjetura como si tuviésemos los condimentos y los gatos para hacerla.

Y la verdad que no la teníamos.

Y la verdad que cuando creíamos que el sentido común nos llevaba que Ruso no podía ser expuesto de la manera que estaba siendo expuesto, en realidad era falta de información.

Y terminó siendo un gesto realmente para enaltecer el de Juan Román Riquelme en Boca.

Darle el lugar a Ruso para que la felicidad en medio de lo que significa saber que se termina, saber que la historia se acaba, que uno pasa para el otro lado de las cosas, es realmente impactante.

Yo no sé qué mirada tenés vos con referencia a la muerte, pero yo le temo, Roberto.

Yo no soy como otros que por ahí capaz que se animan a decir no tengo problema, todos somos mortales.

Pero saber que la historia se termina rápidamente y que todo tu contexto donde vivís y transitás te ayuden a hacerlo de la manera más feliz que se pueda, si es que se puede.

Boca lo ha conseguido, lo ha logrado con Ruso.

Y la familia le ha respetado su decisión.

Y Miguel Ángel Ruso, y ahora viene la parte informativa, esto a mí me consta por mucha gente de llegada, que Miguel sabía todo lo que iba a suceder y que Riquelme sabía todo lo que le iba a pasar.

Y que indudablemente hubo un pacto que es emocionante, es estremecedor, donde no debe ser fácil tener enfrente a alguien que te dice, mirá, en ciertas palabras, de una manera u otra, mirá, yo me voy a morir dentro de muy poco, dejame terminar haciendo lo que me gusta.

Y no es hacerlo en una chacra cortando el césped, es dirigiendo a Boca, a la vista de todo el mundo.

Y Riquelme lo ha aceptado y Ruso lo ha llevado adelante y ha terminado su historia de la manera que todos ya sabemos.

Entonces la verdad, Roberto, es reconocer que no hay que adelantarse a los hechos y no hay que tomar ningún tipo de postura cuando se trata de la vida.

Porque cada uno sabe qué hace con su propia vida, ¿no? Definitivamente cada uno tiene la decisión en todos los momentos conscientes de poder determinar el camino a tomar ante la última pared, inevitable, en donde estamos todos expuestos realmente.

Porque la realidad es que nacemos, salimos en la primera pared, vivimos, transcurrimos y sabemos que tarde o temprano vamos a enfrentarnos a esa tercera pared que es el final de nuestra existencia.

Me parece digno que cada uno pueda elegir cómo poder enfrentarse y con la interesa de todo esto.

Y la interesa de quienes lo han acompañado realmente.

Yo esto te lo dije, quizás él era consciente, y realmente era consciente de cómo quería irse, morir, siendo director técnico de Boca, en ejercicio.

Como experiencia personal yo creo que todos tenemos la posibilidad de pelear cualquier situación difícil que sea y tenemos la libertad de poder elegir ese camino del destino con amor y con dignidad.

A mí personalmente lo sentí en el primer momento que pasó con Russo y siento que estuvo una experiencia y una enseñanza no sólo para los hinchas de Boca, sino para todo el pueblo futbolístico nacional e internacional que ha...