Entrevista al escritor Alfredo Valencia. ABRIL 2025

Jueves diecisiete de abril todo abierto con la mejor moda, ocio y restauración.

Y nos siguen habitualmente esta melodía que están escuchando, les tiene que recordar que Nuria Ruilla está por aquí, nuestra colaboradora de la cultura, que todos los meses nos trae una pincelada de la actualidad cultural. Hola Nuria, ¿qué tal? Muy buenas.

Hola Nono.

Hoy antes de que me presentes a quien viene, vamos a escuchar esto.

Todo empezó cuando aquella serpiente me trajo una manzana y dijo prueba.

Yo me llamaba Dan, seguramente tú te llamabas Eva.

Vivíamos de squatters en un piso, abandonado de moratalar.

Si no has estado allí no has visto el paraíso terrenal.

Cogimos un colchón de una basura, dos sillas y una mesa con tres patas.

Mientras yo emborronaba partituras, tú freías las patatas.

Plantamos cañamones de ketama.

Nuria, esta música le priva un montón a nuestro invitado.

Bueno, los dos somos amantes de Joaquín Sabina.

Bueno, pues iba a decir que él es amante de Joaquín Sabina, del senderismo, de los murciélagos, de la lectura, de la fotografía.

Nacido en el barrio de San Bernabé, en La Línea, en los 70.

Y nos va a presentar su octavo libro. Él es Alfredo Valencia.

Alfredo, muy buenas.

Muy buenas, un placer.

Siempre tenemos una relación telefónica con Alfredo aquí en la radio, porque desgraciadamente ya no estamos en la calle como deberíamos.

Pero pese a eso, pese a esa...

Bueno, es una relación bastante linense, ¿no? En el sentido de cuando se cerró La Verja, ¿verdad? La radioafición hacía las veces lugar para el encuentro.

Y ahora nos viene con una nueva incursión en la literatura, que como siempre ocurre con sus libros, tiene un título de esos que hace pensar.

Sí.

¿Qué es? ¿Cuál? Es la idea. Esa es la idea, que pensemos, y dentro de mis posibilidades en este caso, invito al resto de escritores a que lo hagan, a que como mínimo el título no sea tan fácil, sino que pensemos, por favor.

¿Qué es lo que vienes hoy a contarnos, que me imagino que ahora en alguna feria del libro lo vamos a poder ver presentado? Sí, bueno, traigo ahora Natura et Poesis.

Esto es latín, así que es naturaleza y poesía.

Y además, como suele ocurrir, como yo soy muy malo para los títulos, pues aquí la presente, que me orienta cuando...

Bueno, la presente es su pareja, su compañera de vida.

No yo, no yo, no yo.

Que eso quede claro, ¿no? Ella dice la presente.

Ahí está.

Pero de alguna manera, es que lo iba a insinuar.

Bueno, pero tu compañera que se llama María Begoña, ¿no? Sí.

María Begoña.

Pues le lanzo varios títulos.

Ella, como es habitual, me lleva la contraria.

Lógico.

Y a todo le dice, bueno, si el libro va de poesía y naturaleza...

No te líes más.

Claro, tú que estás todos los días diciendo nombres científicos en latín, ponga el título en latín.

Y efectivamente, Natura et Poesis.

Naturaleza y poesía.

Naturaleza, desde luego, es algo que te ha caracterizado.

Si algo se te conoce en la comarca, así por el público, la gente en general, es tu compromiso con el medioambiente, con el desarrollo sostenible, con darse cuenta que la naturaleza es un miembro más de nuestra familia, o debería serlo, cosa que no lo ha sido a lo largo de la historia.

Pero aquí en este libro, ¿qué es lo que quieres contar? ¿Qué contenido va a ofrecer? Bueno, lo que pretendo a través de esta poesía es, por un lado, un elemento que me sirve a mí de desconexión de la vida urbana y la conexión con la propia naturaleza.

Es decir, es un momento de impaso.

Mira, como dejarme tranquilo, ¿vale? Me voy a la naturaleza, me paseo, me siento, respiro, veo el abejaruco, veo el escarabajo, me desconecto.

Y de ahí, y de mucho antes, viene lo que se le llama inspiración.

Tú, ¿en qué te inspiras? Yo, en todo.

En todo lo que me rodea. ¿Qué me rodea? Pues eso me inspira. Todo, cualquier cosa.

Y eso es lo que he pretendido plasmar en este poemario.

Todo.

Pero perdón que, Incida, y perdón, Nuria, es una poesía que lleva a la reflexión en general, es una poesía que lleva a la reflexión sobre la naturaleza que nos rodea aquí, en este momento.