EP121 Objetos heredados

En Casa con María es un podcast de María Leániz, organizadora profesional y fundadora de Atelier del Orden. Charlamos sobre orden y organización. Cómo poner orden en tu casa y en tu mente para llevar una vida organizada y ser más feliz. Hola, ¿cómo estás? Bienvenida, bienvenido a En Casa con María. Hoy vamos a hablar de esos objetos que llegan a nuestras casas como herencia familiar, cosas que una vez pertenecieron a nuestras madres, abuelos o tías y que muchas veces guardamos sin preguntarnos por qué. ¿Qué hay detrás de esos objetos? ¿Nos conectan o nos atan? ¿Nos hacen bien o nos impiden avanzar? Los objetos heredados tocan fibras muy profundas y están en el centro de muchas decisiones difíciles en los procesos de organización del hogar. Como organizadora profesional en mi empresa Atelier del Orden, rara es la casa en la que no me encuentro objetos heredados. Algunos sanos que despiertan recuerdos de alegría y de risas, bien gestionados, que aportan felicidad a los habitantes de ese hogar y se han integrado en la decoración y en el día a día.

En otros casos se acumulan al fondo de trasteros llenos de polvo y humedad porque no tienen sentido en la vida actual de las personas, pero simplemente les da cargo de conciencia deshacerse de ellos. Y van cargando con ellos con sentimiento de culpa de una mudanza a la siguiente. También me encuentro muchos objetos heredados que se guardan como testigo de duelos aún no resueltos y que hacen sangrar heridas abiertas cada vez que se topan con ellos por la casa, en los cajones o en los altillos. De todo yo quería hablarte en este episodio de En casa con María, de cómo honrar a nuestros seres queridos a través de algún objeto significativo y, sobre todo, de cómo dejar ir a aquellos otros que nos están haciendo daño o simplemente no encajan ya con nosotros. Los objetos que heredamos llevan impresa la huella del amor, del tiempo compartido, de las ausencias que aún duelen.

A veces nos aferramos a ellos con la esperanza de no olvidar, de mantener viva una presencia. ¿Pero tú crees que olvidarías a esa persona querida por dejar de ver un jarrón suyo, un jersey? No, ¿verdad? Nadie. También pueden volverse anclas que nos detienen, que nos impiden crecer, habitar nuestro presente y soñar el futuro. Aprender a soltar no es renunciar al recuerdo, sino permitir que la memoria respire en libertad. Cuando soltamos con amor, abrimos espacio para una nueva forma de vínculo, más liviana, consciente, serena y llena de amor y agradecimiento, que yo creo que es lo que se merecen aquellos seres queridos que ya se han ido. Según la teoría del apego de John Volpe, los objetos pueden ser objetos transicionales que nos conectan con figuras de apego perdidas. Guardar el reloj del abuelo, dice este autor, no es guardar un objeto, es guardar un vínculo. Pero los vínculos con personas que se han ido muchas veces generan más dolor que felicidad.

Tenemos que pararnos y reflexionar qué sentimos cuando tenemos ese objeto en las manos. ¿No es mejor dejar que lo vivido con esa persona pase el filtro del tiempo y se pose, quedándose solo lo bonito, lo positivo en nuestro corazón? Hay muchos autores que han estudiado el valor de los objetos como símbolos de identidad y de pertenencia. Pierre Boucdois habla de cómo los objetos heredados pueden representar capital simbólico, es decir, un valor emocional y social. En muchas culturas, heredar algo es recibir una continuidad familiar. Este destacado sociólogo francés introdujo el concepto de capital simbólico para describir aquellas propiedades que, al ser reconocidas socialmente, otorgan prestigio, honor o legitimidad a individuos o grupos dentro de un campo social específico. Este tipo de capital se manifiesta en elementos como títulos académicos, honores o incluso objetos heredados que simbolizan la historia y el estatus de una familia. En el contexto...