Episodio 123. Wargames: Cuando la tormenta se convierte en un tormento

Hoy nos adentramos en uno de esos temas que a los grognars nos quitan el sueño, nos rompen la estrategia y seamos sinceros, nos han hecho lanzar algún que otro dado por la ventana.

Hoy vamos a charlar sobre ese enemigo invisible, implacable y con un sentido del humor muy particular, el tiempo meteorológico en los wargames.

Porque si amigos, ¿quién no ha planeado una ofensiva maravillosa con sus blindados rugiendo y su aviación surcando los cielos solo para que de repente los dioses del dado decidan que es el día perfecto para el diluvio universal? ¿O que tus divisiones de infantería se queden atascadas en un barrizal digno de Woodstock mientras el enemigo se ríe desde su posición seca tomándose un martini? Es como si los diseñadores de juegos a veces quisieran abrir una puerta a la aleatoriedad, que se cuela, destroza tu partida y te deja con cara de ama.

Porque una cosa es que llueva en Normandía, y otra es que la tormenta se convierta en un tormento.

Así que, preparados paraguas, botas de agua y, por supuesto, vuestro mejor sentido de humor, porque hoy vamos a reírnos, o a llorar, según el caso, de cómo una simple tirada de clima puede convertir la victoria más gloriosa en la más amarga de las derrotas.

Comienza… JUGANDO CON LOS ABUELOS Hola a todos y bienvenidos a la Yayo Cueva.

Os saludan Alejandro Torío, Eduardo Molins y nuestro invitado especial que vuelve a casa después de 5 años más o menos, Esteban Saavedra.

Y vuelve a casa, nunca mejor dicho, porque hoy estamos en la Yayo Cueva original, de verdad, hoy grabamos old fashion.

Efectivamente, porque hoy es, pues mira, 13 de junio, hace un calorazo increíble.

Eduardo ahora tiene su Yayo Cueva arriba del todo, en el ático.

Pero estamos en la Cookie Cueva, ya sabéis que sufrí una reforma, ahora es el despacho de Marta.

Que es súper cookie, pero súper fresquito.

Y entonces hemos pedido permiso y hemos dicho, oye, con esto del tiempo, precisamente, nos deja bajar abajo, sí, sí, sí, y estamos súper a gusto.

Y estamos súper contentos de grabar a la vieja usanza, que así fue como grabamos el primer programa contigo, Esteban.

Hace ya mucho tiempo.

Además es que me he tomado la molestia de ver, coño, hace cuánto tiempo que no vemos Esteban aquí.

Y pues mira, en el episodio 7, allá por 2016, estuvimos hablando de los Statis Pro.

Sí, sí.

De los juegos deportivos.

En el episodio 48 de The Longest Day, con Emilio.

Sí, sí, señor.

En el 59 de Command & Colors Napoleonic, que venía también súper emocionado con el juego de las bellota que me lo enseñaron.

Y después también hablamos de otro Napoleónico, en el episodio 61, Empires in Arms.

Efectivamente.

Fíjate, cuatro programitas, muchos años ya, porque es que empiezas a tirar años de los abuelos y dices, ostras, parece que fue ayer.

Sí, sí, sí, sí, sí.

Fue cuando hablamos de los Statis, ¿eh? Vamos a hacer nueve años, ¿no? Eso es.

Entonces, oye, motivo de estar contentos, de estar contentos que estés aquí y de hago un KitKat aquí.

He visto un correo.