El estrangulador de Rillington Place: John Reginald Christie

Crímenes y criminales con Luis Martínez Valles Vamos a acercarnos a la historia de uno de los asesinos más conocidos de Inglaterra, John Reginald Christie, conocido como el estrangulador de Rillington Place. Nació en West Reading, en Georgeshire, el 8 de abril de 1899. Sexto de siete hermanos. Tenía cinco hermanas mayores, lo que para algunos puede ser una gran muestra de cómo su confianza se vio algo mermada. Se sabe que el padre alguna vez le daba alguna paliza.

El caso es que tampoco podemos decir que hubo un maltrato continuo, pero no era fácil vivir en la casa de los Christie. Con ocho años, dice que queda hipnotizado al contemplar el cuerpo de su abuelo cuando este ha muerto. Está puesto el hombre en el ataúd en el que iba a ser enterrado, y esto a él lo deja completamente marcado. Esto además le causa una fascinación por ver cadáveres. Le gusta contemplarlos. Le gusta observarlos.

Él siguió con su vida. Incluso fue capaz de ganar una beca para la escuela de Halifax cuando tenía 11 años. Destaca en matemáticas. Es realmente inteligente. Incluso consigue un alto grado en la institución de los Boy Scouts. Pero a nivel social no era alguien muy querido. Dicen que cuando era muy joven tuvo que soportar rumores tras su primera experiencia sexual. Se le puso algún apodo no muy cómodo. Algunos de los estudios dicen que John Reginald Christie empezó a acumular un odio y un miedo a la vez que se mezclaba con una especie de no poder mantener el tipo siempre que estuviese con mujeres. Odio. Miedo.

Todos los que se cruzaron en su camino se dieron cuenta que el hombre nunca miraba del todo a la cara. Y que hablaba de una forma muy baja. Casi entre susurros.

Pasando el tiempo llegó a alistarse en el ejército. Incluso en Primera Guerra Mundial estuvo haciendo de operario de comunicaciones. Hubo un ataque a gas mostaza en el que se había afectado y tuvo que ser hospitalizado. Él asegurando que había tenido una ceguera.

Algunos piensan que mentía. Es que John Reginald Christie es de estas personas que te causa una extrañeza cuando compruebas cómo actuaba ante la vida. Hay informes que dicen que luego estuvo 3 años asegurando que no podía hablar. Fingiendo estar mudo.

10 de mayo de 1992 se casa con Ethel Waddington. Durante 4 años estuvo con Ethel. Se cuenta que Christie no fue capaz en casi ningún momento de mantener relaciones con ella. Por lo visto la impotencia surgía en muchos momentos cuando él se veía excitado cuando estaban en el acto sexual su cuerpo no le respondía.

Se sabe también que en esa época él visitaba con frecuencia a los prostíbulos de la zona. Se separa y Christie se muda a Londres. Y durante los siguientes años se convierte en un criminal por completo. Fue condenado por robo robando correo cuando trabajó de cartero. Incluso lo llevó a la cárcel durante 3 meses.