Ética de Spinoza II, 30-40

Hola amigos continuamos con la lectura detenida y atenta de la ética demostrada según el orden geométrico de spinoza nos quedábamos en la proposición treinta de la segunda parte vamos a por ella proposición treinta de la duración de nuestro cuerpo no podemos tener más que un conocimiento sumamente inadecuado de la duración de nuestro cuerpo no podemos tener más que un conocimiento sumamente inadecuado cuánto va a durar su vida cuánto va a durar su cuerpo cuánto tiempo van a estar sanos cuando va á venir ese decaimiento del cuerpo de eso está hablando espinoza en este momento vamos a ver como lo demuestra dice así demostración la duración de nuestro cuerpo no depende de su esencia ni tampoco de la naturaleza absoluta de dios por el contrario él es determinado a existir y a obrar por causas tales que también ellas son determinadas por otras a existir y a obrar de cierta y determinada manera y estas a su vez por otras y así al infinito así pues la duración de nuestro cuerpo depende del orden común de la naturaleza y de la constitución de las cosas en cambio el conocimiento adecuado de cómo están constituidas se da en dios en cuanto que tiene las ideas de todas ellas y no en cuanto que sólo tiene la idea del cuerpo humano por tanto el conocimiento de la duración de nuestro cuerpo es sumamente inadecuado en dios en cuanto que se considera que sólo constituye la naturaleza del alma humana esto es este conocimiento en nuestra alma es sumamente inadecuado bien eh ya sabemos deus sive natura cuerpo alma todo es uno todo es uno hay una única sustancia por tanto nadie sabe cuánto va a durar esta cuerpo en la que la parte material de nuestro cuerpo en todo caso el alma puede el alma es inmortal es una de las tesis que dice espinoza pero el cuerpo lo mortal está aquí aris espinosa refiriéndose a esa teoría aristotélica que dice que materia y forma van juntas llevado a términos religiosos como está tratando ahora aquí espinoza es posible separar el cuerpo y el alma dicen algunas religiones retomando el platonismo no lo que sobrevive es el alma y lo que muere es el cuerpo pero la corriente aristotélica que es la que retoma el cristianismo dice no el cuerpo también resucita cuerpo y alma es lo mismo no pueda resucitar el alma sin el cuerpo y el cuerpo sin el alma bien en cualquier caso en este caso la proposicion treinta de la que está hablando espinoza nos dice que no podemos saber que puede afectar al cuerpo o sea que puede acabar con la salud del cuerpo que es lo que lo puede determinar si el futuro del cuerpo no está escrito es una interpretación vamos a ver si la proposición treinta y uno puede poner un poco de luz en todo esto dice así la proposición treinta y uno de la ducha ración de las cosas singulares que están fuera de nosotros no podemos tener más que un conocimiento sumamente inadecuado no podemos tener clara mente lo que va a durar las cosas vamos a ver como lo demuestra espinoza dice cada cosa singular como el cuerpo humano debe ser determinada por otra cosa singular a existir y a obrar de cierta y determinada manera y esta a su vez por otra y así hasta el infinito ya sabéis nada viene de la nada como decía aristóteles no hay algo siempre que origina otra cosa pues bien prosigue nuestro autor pero como por esta propiedad común de las cosas singulares hemos demostrado en la proposición precedente que no tenemos de nuestro cuerpo más que un conocimiento sumamente inadecuado esto mismo hay que