EuroCelta

Hola, muy buenas a todos, gracias por dar al play, mi nombre es Óscar y estás escuchando Fútbol de Otro Siglo.

Hoy viajaremos a Vigo, a finales de los años 90 cuando un excepcional equipo gallego lo apodaron como el Eurocelta, un verdadero mata gigantesco europeo, pero que nunca logró pasar de cuartos, era una UEFA de eliminatoria pura a ida y vuelta y que acababa de absorber por desgracia la recopa de Europa, lo que provocó una significante subida del nivel de la competición a comparación de las últimas ediciones.

Preparaos que comenzamos, que roda el balón amigos.

El 15 de septiembre de 1971 el Celta se convertiría en el primer equipo de Galicia en disputar una competición europea, su rival era el Aberdeen escocés, un campeón que ya atesoraba grandes jugadores, aunque faltaba una década para su edad dorada en la que ganaría la recopa de Europa ante el Real Madrid.

Los celestes cayeron con demasiada inocencia en aquella primera incursión en la copa de la UEFA, porque el Celta había sido el equipo de revelación en el campeonato anterior e iniciaba aquella temporada 71-72 con toda la ilusión posible.

La directiva aprobó un presupuesto de casi 40 millones de pesetas y se logró mantener el bloque que había deslumbrado la liga en los últimos meses.

Además, los partidos de preparación invitaban a la esperanza, en el trozo de Ciudad de la Línea habían goleado 3-0 al Dinamo de Bucarés, aunque se perdió la final con el Rapi de Viena y el 15 de agosto en la presentación del equipo en Balaidos los vigueses vencieron 2-0 a un rival propicio, el Ompilla yugoslavo.

Más tarde en el ciudad de Vigo se ganó el Pontevedra pero los locales cayeron 2-1 ante el Pantanatinaikos que se llevó de vuelta a Grecia el trofeo descomunal de la V, el Castillo y el Olivo, además de 300.000 pesetas por participar en el torneo.

Evidentemente la afición dio a estos duelos su valor relativo de pretemporada, pero cuando empezó la liga parecía que el Celta volvía a tener el mismo equipazo engrasado que el año anterior.

En el primer partido ganaron al Atlético de Madrid en Balaidos por 2-1 y en el segundo se arrancó un empate y un positivo de la época al Betis en el Benito Bellamarín, por eso la gran decepción llegaría precisamente con el Aberdín en la UEFA.

Días antes del partido aparecieron anuncios en la prensa, viaja a Escocia con el Real Club Celta, vuelo en reactor directo desde Santiago, en las oficinas del club podía formalizarse la inscripción que incluía la entrada para el partido de vuelta, todo por el precio de 8.500 pesetas por persona de la época.

Las puertas del fútbol europeo a nivel de copas se abren para Galicia, este año por primera vez en la historia de las tres competiciones europeas un equipo de nuestra región se acodeará con lo más ganado del fútbol continental, proclamaba el pueblo gallego el día antes del primer encuentro en Balaidos.

He leído que el Celta ha sido el equipo sorpresa de la liga española, comentaba el entrenador escocés.

De cualquier manera ganaremos la eliminatoria, es nuestra, lo repito, intentaremos ganar fuera y luego en casa, el Aberdeen que llegó el día anterior fue recibido en alimentamiento por el alcalde y la plantilla escocesa paseó luego por el centro de la ciudad, pero ese miércoles la decepción fue mayúscula, con una entrada regular en Balaidos, el Aberdeen vencía por 0-2 con dos tantos en la segunda parte y el público salió del estadio en silencio decepcionado.

¿Y qué hacía el Celta? No intentó otra variante que el pelotazo a la olla, a favor de los defensores escoceses, así lo había el cronista del pueblo gallego, en la presentación a nivel europeo mal, sin atenuantes, no se escatimaron críticas al entrenador en grandes titulares, en competiciones oficiales seriedad ante todo, no se puede mentir.