Evangelio y comentario del día 26 de agosto de 2022.

Entonces se parecerá el reino de los cielos abiertos vírgenes que tomaron sus lámparas y salir al encuentro del esposo cinco de ellas eran mesías y cinco eran prudentes las necias al tomar las lámparas no se produjeron de aceite en cambio las prudentes se llevaron al cosas de las lámparas el esposo tardaba centros o año a todas y se durmieron a medianoche se oyó una voz que llega el esposo salida su encuentro entonces se despertaron todas aquellas vírgenes y se pusieron a preparar sus lámparas y las necias dijeron a las pueden antes darnos de vuestra aceite y que se nos pagan las lámparas pero las prudentes contestaron por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras mejores que vayáis a la tienda y lo compráis mientras iban a comprarlo llegó el esposo y las que estaban preparadas centraron con el al banquete de bodas y se cerró la puerta más tarde llegaron también las otras vírgenes diciendo señor señor abre nos pero él respondió en verdad os digo que no conozco por tanto velar porque no sabéis el día ni la hora la temática de este evangelio es algo muy presente a lo largo de la historia cristiana la vigilancia espiritual de hecho la parábola de las vírgenes necias y las vírgenes prudentes es una unificación plástica de la doble actitud que podemos adaptar los cristianos ante el paso del señor la vigilancia dile gente o la despreocupación indolente el pasotismo cuando se lee este pasaje es casi inevitable tener cierta antipatía por las vírgenes prudentes pues parecen egoístas niños y niñas no compartir el aceite y pudiéramos pensar que a causa de esto el tiempo pasa y que el esposo las deja afuera pudiera aparecer una actitud poco angeli de las vírgenes prudentes y sin embargo jesús las llama vírgenes prudentes frente a las vírgenes medias jesús nos hace aquí un discurso sobre el compartir fraterno sino sobre la vigilancia sobre lo que es esa actitud vigilante anti la imprevisibles llegada de novia o esposa por eso la parábola un apunte clarísimo sobre la responsabilidad personal que tenemos todos santis llegada jesús nos insiste en cali y recalca en este evangelio que en la vida hay cosas que son completamente personales e intransferible lámpara la reciben todas y el aceite solo estilo procuran las prudentes las necias piensan que con la lámpara ya está todo ello a veces no puede pasar eso nosotros como tenemos la lámpara tenemos la llamada a la vocación la fe el grupo al que pertenecemos pues podemos creer que está todo hecho y no nos damos cuenta de que es salam para sin aceite no sirve para nada sirve para muy poco la actitudes las vírgenes prudentes es grande es grandiosa y demuestra una gran rectitud porque ellas cuando han recibido la lámpara se han procurado el aceite que haga que esa lámparas sea fecunda sea útil y que nos ha pasado en cambio las necias consideraron que que teniendo ya la lámpara ya no había que hacer nada más y se echaron a dormir tranquilamente pero islas vírgenes prudente porque no compartieron el aceite porque no les dan de su aceite hay cosas que no se pueden repartir ellas se niegan a repartir lo que no es reparable se niegan a negociar con lo que no es negociable se niegan a jugar a gastar a utilizar mal lo que es lo más valioso que es el aceite esta aceites la gracia de dios la gracia que hace que la lámpara tarda la vocación la vida sin el aceite no sirve para nada la vocación sea la que sea y todos tenemos una sea y contarla si la gracia que la sostenga la alimente al final como una lámpara que no se entiende que no sirve para nada la educación es un regalo es un don y hay que a cogerlo pero luego hay que procurar cada día de nuestra vida el aceite que la mantenga encendida fresca útil viva y por mucho que yo quiera compartir mi aceite con otra no puedo darlo por qué la gracia es personal transferible no puedo repartir la gracia mía la personal lo que está pensado para mí desde siempre a costa de dejar milán para sin fuerza por eso las vírgenes prudente no reparten su aceite y les dije en a las vírgenes necias que vayan a buscar aceite