La fidelidad de Dios es en todo tiempo

Por la misericordia de Jehová, subráyelo.

Por la misericordia de Jehová, subráyelo.

Por la misericordia de Dios no hemos sido consumidos porque nunca decayeron sus misericordias.

Nuevas son cada mañana.

Grande es tu fidelidad.

Estamos nuevamente en el santuario y busco este día llevarles, llevarnos a una reflexión, una reflexión que ha de refrescar nuestro corazón, ha de tocar nuestro corazón y es sobre la fidelidad de Dios.

Ninguno de nosotros es extraño a que Dios se ha mostrado a través del tiempo en nuestras vidas.

Ninguno de nosotros es extraño.

Sin embargo, no todos tenemos una actitud recíproca para Dios.

Él es fiel y la pregunta nuestra es, o la pregunta para nosotros es, ¿y nosotros lo hemos sido? Naturalmente, cada uno tendrá su propia conclusión.

Y podrá decir, Dios sabe que yo le he sido fiel.

Y Dios sabe que para Él es que, o a Él es que se lo agradezco, pero esta añadidura posiblemente no sea buena.

Pero yo no ando con alardes, pastor.

Yo no ando diciéndole a nadie, pues es un error.

Porque deben de saber otros que Dios es fiel.

Deben de saber otros que Dios es fiel.

Deben de saber otros que Dios es fiel.

Deben de saber otros que Dios es fiel.

Levante por lo menos la mano si no quiere gritar.

Dios ha sido fiel.

La historia nos habla de la fidelidad de Dios, pero mi enfoque es a lo largo de la historia bíblica.

Desde las primeras palabras de Génesis, en el Antiguo Testamento, en el Nuevo Testamento, nos damos cuenta de cómo Dios inició todo y todo lo cubrió precisamente con esa parte de su carácter, la fidelidad de Dios.

En un momento Dios dijo, en los días de Noé, la cementera no va a cesar, la cosecha no va a cesar, la siembra no va a cesar, la lluvia va a aparecer.

Y eso forma parte de la fidelidad de Dios.

Yo estaba un día, precisamente, pensando en eso.

¿Cómo es que prosperan los malos? Y eso aquí está en la Biblia.

¿Cómo es que esa gente está día a día añadiendo a su cuenta sumas, pero increíbles en las finanzas y en otros bienes? Pero no tienen nada que ver con Dios.

Al contrario, se vuelven opositores, financian de tal manera a movimientos para silenciar esto que es tan importante para el alma, para el espíritu.

Porque las cosas materiales van a pasar.

No sé si usted conoce a alguien que hizo fortuna antes de morir, hizo inventario y dijo, esto es mío, yo lo trabajé, no les pertenece a ustedes, así que yo me lo llevo, irá conmigo.

Eso no ha sucedido.

Bueno, yo conocí de alguien en una ciudad, oí de que esto que acabo de decir, él lo pronunció.

No estaba él satisfecho con pensar que todo su esfuerzo, todo lo que había producido, lo iba a dejar en manos de sus hijos.

Fíjense qué cosa.

Alguien podría decir que no se lo va a dejar a personas extrañas, pero a sus hijos.

Alguna cosa no estaba bien para que dijera que no se lo iba a dejar a sus hijos.

Y entonces lo llevó casi a un compromiso a la familia