Girón graduó a estudiantes como héroes

Abril de 1961, Cuba, una isla en Vilo, enfrentó en Playa Ginón la primera gran derrota del imperialismo en América Latina.

A través del combatiente Carlos Muro Guevara, revivimos aquellos tres días donde jóvenes milicianos, con fusiles y coraje, escribieron una página imborrable de la historia.

En la noche de la madrugada del 17 de abril se recibió la orden del capitán Fernández, director de nuestra escuela, de organizar la escuela en batallón para partir hacia la arena de Girón a combatir la invasión mercenaria.

Carlos Muro Guevara, de 18 años, estudiaba en la escuela de responsables de milicias cuando el rugido de la invasión interrumpió sus clases.

Nos apoderamos de un grupo de camiones que pasaban por la carretera, le bajamos los productos y en esas mismas camiones montamos el batallón y sobre las 10 de la mañana aproximadamente, después de pasar por Jagüez Grande, llegamos al central Autralia.

Allí el director de nuestra escuela, el capitán Fernández, indicó continuar por la carretera de Pálpite hacia Playa Larga.

Sin comida ni agua avanzaron hacia Playa Girón. La inocencia de la juventud se estrellaría pronto contra la realidad de la guerra.

En el transcurso de la carretera, dos aviones, si mal no recuerdo, B-26, pasaron volando un vuelo rasante y nosotros a alumnos jóvenes les saludamos y les empezamos a darle victoria al avión.

Y cuando miró, empezó a ametrallarnos porque eran aviones mercenarios con la bandera del país y la estrella solitaria. Dejamos los camiones y continuamos la marcha a pie hasta llegar a Pálpite.

Y en Pálpite, sobre las 3 de la tarde, sufrimos un gran bombardeo donde cayeron 26 de los alumnos que fallecieron de la escuela y otro grupo quedó herido. Y después en la tarde noche avanzamos por la carretera hacia las arenas de Playa Larga.

Al anochecer llegó el refuerzo decisivo, los tanques del ejército rebelde, mientras en el Central Australia un hombre dirigía la batalla.

Nosotros sabíamos de la presencia del comandante en jefe en el Central Australia, el 19, él estaba en un tanque haciendo los disparos de los toques finales de la derrota de la invasión en menos de 72 horas.

La brigada 2506 se rindió, Cuba había vencido. Carlos y sus compañeros pasaron 10 días peinando los montes buscando mercenarios fugitivos. Regresaron a la escuela, pero ya no eran estudiantes, eran héroes.

Periodista, ¿Quién les habla? Luis Antonio Salavarría Melián