Gustavo Cordoba - 17/04/25

11 de la mañana, 11 minutos.

Es una mañana soleada en la ciudad de Buenos Aires, 19 grados la temperatura, pero acordate que a la noche se vienen las tormentas y parece que van a ser fuertes.

De hecho hay una alerta amarilla del Servicio Meteorológico Nacional.

Gustavo Córdoba es consultor y analista político, director de Subán Córdoba, y está en comunicación con nosotros.

Hola Gustavo, ¿cómo estás? Te saluda Nacho Otero acá en Delta 90.3.

Buen día.

Nacho, buen jueves, ¿cómo estás? Igualmente para vos, ¿eh? Jueves santo.

Bueno, ¿cómo estás viendo? Empiezo primero por la política, después obviamente vamos a tocar un poco lo económico también, desde la política, pero primero con esta posibilidad completamente enfriada, ¿no? Y hasta, en un momento cuando uno se la ponía a analizar, enfrió, ridícula, de una alianza entre la Libertad Avanza y el PRO en la provincia de Buenos Aires.

Bueno, tiene un grado de complejidad importante, toda vez que la coyuntura nos está marcando que esa alianza primero tiene que resolver la situación de Capital Federal.

Claro.

Lo va a hacer en breve, ¿no? Yo te decía al principio, ridícula en el sentido de no tiene ningún tipo de sentido sacarse los ojos en la ciudad de Buenos Aires y abrazarse en la provincia.

Porque en definitiva ahí el mensaje que se transmite es confuso, ¿no? No tiene coherencia lo que se hace en un distrito y lo que pasa en el otro.

Y además hay que tener en cuenta que el impacto de lo que sucede en Capital Federal va a ser determinante, porque hay que decirlo también en estos términos, todo lo que sucede en Capital Federal tiene impacto nacional.

Y fíjate que en los posibles escenarios, el que más le favorece al Gobierno en mi ley es un eventual triunfo, cosa que yo creo que hoy está bastante lejos de que eso pueda suceder, pero hay que considerarlo como hipótesis.

Eso le puede propinar un golpe muy duro al PRO, que gobierna el distrito.

Hay que considerar también la posibilidad de que triunfe, ¿no? Silvia Lospenato, la candidata del PRO.

Chances bajas de que esto ocurra.

Eso puede incluso, te diría, generar un problema de voto castigo al Gobierno Nacional en el distrito capital.

Pero la opción que tiene posiblemente más asidero por estos días, viendo lo que es el consenso de los estudios de opinión pública, es que Leandro Santoro en algunas le saca más distancia, en otras menos, pero es como que hay una coincidencia en que Leandro Santoro va puntero.

Y esto, más allá de lo que pueda significar para la fuerza política que respalda Santoro, hay que leerlo también como un voto castigo al oficialismo de la ciudad y al oficialismo nacional.

Esto tiene impacto en lo que viene después.

Pensar que no lo tiene me parece que es un elemento muy naif, muy inocente.

Claro, totalmente.

Ahora, también en cuanto a lo que muchas veces fue uno de los activos del Gobierno, que era manejar la agenda.

En cierto punto, durante gran parte del Gobierno de mi ley, todos los medios, todos los actores políticos y sociales, hemos estado hablando de la conversación que planteaba el Gobierno.

En el último tiempo, ¿sigue teniendo esa palanca sobre el discurso político y social en Argentina el Gobierno, o la fue perdiendo un poco después del escándalo del gobierno? Es muy interesante lo que planteas porque me das pie a contarte que, de acuerdo a nuestra opinión, desde el posteo de mi ley en el Día de los Enamorados hasta acá, lo que estamos viendo es una pérdida de reputación del Gobierno en materia económica.

Nosotros, cuando medimos a un Gobierno, no importa si es municipal, provincial o nacional, si puede ser este o el anterior, medimos tres dimensiones.

Medimos la imagen personal del líder, del gobernante.

Medimos el desempeño de su gobierno, en términos de aprobación o desaprobación.

Y medimos también esta dimensión de la reputación, de la credibilidad.

Y creo que el posteo de la criptomoneda Libra generó, en los que de alguna manera tenían expectativas favorables con el Gobierno, ciertamente una crisis de desilusión o una crisis de decepción, Nacho.

Porque lo que estamos viendo es que desde ese momento hasta aquí, el Gobierno ha perdido credibilidad en materia económica, que es el tema central.

Porque Milenio no se equivocó en política nuclear, ni se equivocó en política educativa, ni tampoco lo hizo en un tema menor.

Se equivocó en lo que es su especialidad, el tema que lo llevó a la presidencia, de manera indudable.