La habitación de al lado

Bienvenidos a Cinemafilia, un podcast del periódico Jiró.

Somos Mario César Fialho Díaz y José Alejandro Gómez Morales y juntos les invitamos a descubrir entre cámaras, luces y sonido, el arte de todas las artes.

Cae la nieve, cae débilmente en el universo y cae suavemente sobre todos los vivos y los muertos.

No todos los días tenemos un podcast hablando de Pedro Almodóvar, aunque estoy diciendo un poco de mentira, creo que hemos escrito demasiado sobre él y hasta hablado demasiado sobre él. Ya le dedicamos uno de nuestros primeros episodios de hecho, pero lo gracioso es que este Cinemafilia, en concreto el de hoy, yo creo que si tú naciste para grabar un Cinemafilia es este, porque no sólo vamos a hablar de una película que te gustó, sino que tú te leíste el libro antes de verla. Tú estabas a la casa de este producto.

Sí, tenía que leerme el libro antes de la película porque era una obligación que tenía para conmigo mismo y creo que es para con el mismo Pedro. O sea, por muchos motivos la película la que vamos a hablar hoy, La Habitación del Lado, no es un Almodóvar cualquiera. Es el primer largo en inglés que hace, trabaja con dos actrices que no se trabaja todos los días, todos los directores. O sea, fusionar a estas dos actrices es algo que los fans de Almodóvar nos sentimos bastante conmovidos cuando vimos todo el cast que se unirá a la película. Y además de eso, una trama súper compleja.

Es decir, esa novela que decidió adaptar no es para cualquier director. No, no. Y además el tema, incluso creo que ya entrándonos un poco en materia, creo que Almodóvar, lo dice en una entrevista, tomó las bases de la historia pero ya después hizo suya la película, hizo suya la historia con lo que pasó y de ahí fue un viaje tanto para las actrices como para él. Yo la sentí desde el principio como puro Almodóvar. ¿Sabes por qué? Por los colores. Yo creo que es la película Almodóvar donde no sé por qué quedan más lindos, mejor recogidos los colores.

No quiero sonar superficial con lo que estoy diciendo. Es uno de los tantos elementos propios de Almodóvar. Pero es que no olvidemos que el melodrama, un género para mí entre el cual él es un maestro y un gran estudioso a través de su propio arte, una de las claves del melodrama es la elaboración visual. Es decir, vincular lo emotivo con una elaboración visual que algunos cineastas lo logran con mayor complejidad que otros. Y Almodóvar aquí logra, para mí, una de sus obras más complejas. No sé, si no la que más. Es muy difícil para mí empezar por algún sitio hablar de la habitación de al lado.

Ingrid, ¿crees que debería despedirme de todos mis amigos? Creo que deberías hacer lo que te apetezca.

No pienso marcharme sufriendo una agonía humillante.

No sé qué decirte.

Espero que digas que sí.

¿Sí a qué? Bueno, creo que lo mejor que podríamos hacerle para hablar tanto de la habitación de al lado como de Pedro sería señalando un poco el desarrollo de su propia filmografía. Creo que del Pedro Almodóvar, de la Madrid destapada, hay muchísimo que se ha quedado detrás y se ha convertido en este Pedro de dolor y gloria, que yo creo que ya dolor y gloria viene a ser la película que viene a definir lo que es Pedro ahora.

Incluso una película con, vamos a decir, tantos desequilibrios en la crítica, en la recepción que tuvo como Madres Paralelas, a mí igual me parece que forma parte ya de una etapa posterior a Julieta, una etapa que empezaría con Julieta hacia acá, en la que ininterrumpidamente ese nombre narra de una manera cada vez más señalada.

Sí, empiezas a ver como que los casts, o sea, los repartos de personajes empiezan a ser más reducidos, ya no vienen a ser estas comedias como Mujeres al borde de un ataque de nervio, muy coral, muy buena cantidad de personajes y se vuelven a momentos muchísimo más intimistas en Julieta.

Son dos mujeres, o sea, la misma actriz, pero interpretada en distintos momentos de su vida. Un solo personaje, dolor y gloria es un solo personaje.

Incluso la voz humana es una maravilla para mí, eso de cortometraje, pero además yo tengo, vamos a decir, una insatisfacción con nuestro anterior episodio de Almodóvar.

Con nuestro Weston, con nuestro Weston inacabado.

No, no, no iba a hablar de extrañas formas de vida, no, no.

Quiero decir nuestro propio episodio anterior de Almodóvar, porque yo no había visto, que yo recuerde, o no tuve presente en ese momento de grabar, Los Abrazos Rotos, que para mí es como que una de las cumbres ahora mismo de Almodóvar, a veces siento que es la que más me gusta, y ya se va adentrando también en una etapa de gravedad, de madurez.

La regresa de estas últimas obras sería Los Avantes Pasajes, vamos a decir, eso es un retorno a la locura, pero posteriormente ya de Julieta 2016 en adelante, hasta la que nos ocupa hoy, es un retorno.