Historias de terror #2 | La Sonrisa de la Medianoche: El misterio de la risa que aterra a un pueblo

Advertencia las narraciones de este programa pueden incluir escenas perturbadoras y contenido impactante si eres sensible a estas historias no deberías continuar historia el viento aullaba entre los acantilados levantando nubes de espuma del mar embravecido desde la ventana del desván laura observaba las olas chocar con fuerza contra las rocas mientras los gemidos del aire azotaban los cristales como si quisieran entrar la vieja casa con sus viejas crujientes y sus paredes descoloridas parecía más un mausoleo que un hogar había algo en el aire que no era solo me da un peso invisible que se colaba por las grietas llenando cada rincón con una presencia inquietante habían pasado tres días desde que laura llegó para limpiar la casa de su abuela pero sentía que el tiempo se había detenido cada tarea le tomaba horas el polvo parecía multiplicarse y el frío se hacía más intenso a medida que se acercaba la noche esa tarde mientras revisaba los viejos recuerdos acumulados en el desván lo encontró un espejo alto cubierto por una sábana gris el marco dorado decorado con rostros en relieve parecía brillar incluso bajo la tenue luz que se filtraba por las ventanas polvorientas laura recordó como un eco lejano las advertencias de su abuela no te mires en ese espejo después de la medianoche es el arde la sonrisa de la medianoche de niña había tomado esas palabras como cuentos para asustarla como historias diseñadas para proteger a una mente infantil de las sombras pero ahora en la penumbra del desván esas palabras parecían más una súplica que una advertencia esa noche la luna llena se alzó como un ojo vigilante sobre el horizonte laura incapaz de dormir se sentó frente a la chimenea con una copa de vino observando las sombras danzar en las paredes miró el reloj once cuarenta y cinco de la noche las palabras de su abuela volvieron a su mente pero no como un recuerdo sino como un desafío que podía ser tan peligroso en mirarse en un espejo se rió para sí misma burlándose del temor que parecía impregnado en la casa decidida subió las escaleras hacia el de span el espejo seguía allí imponente y extraño en su perfección con un movimiento rápido retiró la sábana revelando una superficie impecable que reflejaba la luz de la luna con una claridad antinatural el reloj marcó las once cincuenta y nueve de la noche laura respiró hondo fijando su mirada en su propio reflejo esto es ridiculo murmuraban pero no apartó los ojos del cristal cuando las campanadas resonaron por toda la casa el mundo pareció detenerse durante un breve momento el reflejo fue simplemente eso una imagen de ella misma con su cabello revuelto y su expresión seria pero entonces ocurrió sus reflejo sonrió no fue una sonrisa normal sino una mueca antinatural amplia que se extendía más allá de lo posible red hilando unos dientes blanquísimos que parecían brillar bajo la luz de la luna laura no sonreía pero su reflejo sí un frío intenso la envolvió como si el aire hubiera sido drenado de la habitación intentó apartar la mirada pero no pudo la sonrisa de su reflejo creció deformándose hasta convertirse en algo monstruoso los ojos en el espejo los suyos pero no todo se oscurecieron hasta volverse pozos negros que la miraban con una intención que no podía comprender cuando finalmente logró cerrar los ojos y apartarse el reflejo se movió un segundo después como si el espejo estuviera reaccionando a destiempo laura tropezó cayendo al suelo y al levantar la vista el espejo volvía a mostrar su imagen habitual respirando con dificultad salió del desván y cerró la puerta con llave a partir de esa noche nada