iVoox
iVoox Podcast & radio
Download app for free
By Historias Pulp Historias Pulp
EL HOMBRE QUE FUE JUEVES. CAPÍTULO 2

EL HOMBRE QUE FUE JUEVES. CAPÍTULO 2

4/7/2025 · 23:04
2
199
2
199
Historias Pulp Episode of Historias Pulp

Description of EL HOMBRE QUE FUE JUEVES. CAPÍTULO 2

El hombre que fue Jueves , una novela de GK Chesterton que los va a llevar por un camino lleno de misterio, intriga y sorpresas inesperadas.

Imagina a Gabriel Syme, un poeta con una vida aparentemente tranquila, que de pronto se ve arrastrado a un mundo secreto donde nada es lo que parece. Su aventura comienza cuando recibe una misión: infiltrarse en un grupo extraño y peligroso, liderado por una figura enigmática conocida como Domingo. Este consejo, donde cada miembro lleva el nombre de un día de la semana, está envuelto en sombras, y Syme, ahora Jueves, tendrá que navegar entre el caos y el orden para descubrir qué está pasando realmente.

Con un estilo único, Chesterton mezcla humor, filosofía y un toque de lo absurdo en una historia que te mantiene al borde del asiento. ¿Es una conspiración? ¿Un juego de máscaras? ¿O algo mucho más profundo? Esta no es solo una novela de detectives, es un rompecabezas que te invita a reflexionar mientras disfrutas de el estilo incisivo, directo y lleno de poesía de este autor inglés. Chesterton insistió en que la novela no pretendía describir el mundo real tal como era, sino el "mundo de duda salvaje y desesperanza" que los pesimistas describían en su época, con "solo un destello de esperanza en algún doble significado de la duda".Nos ofrece, por tanto, una narrativa que, aunque está llena de tensión y caos, termina con un mensaje de esperanza y afirmación de la bondad.

Historias Pulp. Terror, Ciencia Ficción y Fantasía

Read the EL HOMBRE QUE FUE JUEVES. CAPÍTULO 2 podcast

This content is generated from the locution of the audio so it may contain errors.

El hombre que fue jueves, de Hilbert K Chesterton Capítulo 2 El secreto de Gabriel Sime Paró el coche frente a un bar de aspecto miserable y Gregory invitó a entrar a su compañero. Sentaronse en una especie de trastienda estrecha y oscura ante una pobre mesa que tenía una sola pata en el centro. El cuarto era tan pequeño, tan sombrío que apenas se podía distinguir al camarero en la vaga sensación de bulto barbado que producía su presencia.

—¿Quiere usted que le sirvan algo? —preguntó Gregory cortésmente. —El poté de foie gras que dan aquí no es bueno, pero le recomiendo la liebre.

Sime creyó que era una broma y, aceptándola con una naturalidad de buen gusto, contestó —Prefiero que me traigan una langosta a la mayonesa. Con gran asombro oyó que el camarero le contestaba —Muy bien, señor, y sintió que se alejaba para cumplir sus órdenes. —¿Qué quiere usted saber? —añadió Gregory con el mismo tono. —Yo voy a pedir crema de menta. He cenado ya. ¿Me va usted a permitir que le obsequie con una media botella de pomerí? Ya verá usted. —Gracias, es usted muy amable —dijo Sime impasible.

Pero sus intentos, algo torpes para reanudar la conversación, quedaron cortados como por un rayo ante la llegada de la langosta. Probó la Sime, la encontró muy buena, y se puso a comer deprisa y con apetito. —Perdóneme si no disimulo mi placer —le decía sonriendo a Gregory—. No todas las noches tiene unos sueños tan agradables. Esto de que una pesadilla acabe en langosta es para mí de una novedad encantadora. Lo que muchas veces me ha sucedido es lo contrario. —Lo está usted soñando, se lo aseguro. Antes está usted próximo al momento más real y conmovedor de su vida. Pero aquí está el champán. Ya verá usted.

Confieso que hay alguna desproporción entre las interioridades de este excelente hotel y su aspecto exterior, tan sencillo y humilde. Es que somos muy modestos. Sí, nosotros somos los hombres más modestos que ha habido en el mundo.

—¿Y quiénes son nosotros? —preguntó Sime apurando la copa de champán.

—Casi nadie —repuso Gregory—. Nosotros somos los anarquistas serios en que usted no cree. —¡Ah! —dijo Sime—. Tienen ustedes muy buenos vinos. Hubo una pausa y después habló Gregory.

Comments of EL HOMBRE QUE FUE JUEVES. CAPÍTULO 2

This program does not accept anonymous comments. Sign up to comment!