La hora de Tito 21/04/2025

La Hora de Tito, con Tito Irazusta.

Casio Arracha León, muy buenas tardes y bienvenidos.

Aquí estamos en un nuevo programa en el que te invito a conocer mejor a deportistas de los que posiblemente hayas oído hablar mucho, incluso les habrás visto en acción, pero seguro que tienen cosas que en la conversación que mantengo con ellos ofrecen curiosidades desconocidas por todos.

Hoy he invitado al programa a una gran mujer, una chica del balomano, de las de toda la vida, balomano de toda la vida, sí.

Ni ella sabe cuándo empezó a coger un balón, pero lo que sí sabe es que su carrera ha estado plagada de éxitos de todo tipo.

Primero jugó, luego entrenó y ahora lleva la gestión de balomano más laureado de nuestra tierra.

Ella es Tatiana Garmendia López, nuestra querida Tati.

Dona Estiarra, nacida el… Oye, aquí qué cosas pasan porque lo mismo nos contaba Peyo Ruiz Calestani en el programa anterior.

En la oficialidad pone una fecha, pero las amachos respectivas aseguran que parieron otro día, que es lo que dice oficialmente la situación.

Así que adjudicamos lo que la ama de Tati ha dicho, que fue cuando nació, el 15 de febrero de 1974 y no el 16 como figura en casi todos los documentos oficiales.

Bueno, pues son algunos de los datos que nos permiten así, curiosamente, entrar en materia porque hay mucha tela que cortar.

La hora de Tito, con el patrocinio de Oyarzun Bike, restaurante a Rocaberri de Ondarribía, Easomotor Oyarzun Linzirin y Restaurantes Ñam de Donostia.

Hola Tati, ¿qué tal te va la vida? Hola, muy bien.

¿Eh? Bueno, que tú naciste el 15.

Eso dice mi madre.

Y yo lo que diga mi madre.

Eso te digo porque es que aparece el 16, es que a Peyo le pasaba igual, no sé si había nacido el 13 y le ponían el 17, o sea, bueno, las madres saben mejor que nadie qué día han parido, ¿a que sí? Sí, sí, cuando hay cosas oficiales hay que poner el 16, pero si no… Ya, ya, porque claro, luego al final si no coincide la fecha que te figura en las oficiales dice que usted no es la misma, ¿no? Los follones esos.

A ver, ¿ya te crees todo lo que has conseguido? Me lo tengo que creer porque es así, pero si echas la mirada atrás cuesta… Sí, porque… Cuesta creer.

Igual te pasa como a mí, ¿no? Que a mí cuando me dicen mis hijos, igual también te llegan los tuyos, oye, ¿y estuviste en este mundial de no sé qué? Oye, ahí está.

¿Y estuviste con Maradona en no sé dónde? Oye, ahí está.

Y tú… No, no, que cuando ves un poco el palmarés así en papel, porque igual en la mente igual pasa así tranquilamente, pero cuando lo ves en papel dices, ostras, me da un poco de vértigo haber hecho todo esto porque es que tú no sé si sabes que has hecho mucho.

A ver, sí, sí, sí que lo sé, pero realmente no me pongo a pensar que haya sido tanto.

Al final el día a día te come y es otra temporada más y otra temporada más y, ostras, si echas la vista atrás sí que son muchas cosas.

Y de entrada ya me estoy recordando a mi mamá.

Era igual.

Yo decía, mamá, tú, Carmen Adarraga, que tú conoces muy bien, luego hablamos de ello, dice tú en los años 40 ¿cómo jugabas si estaba prohibido jugar? Ah, era igual.

Pero, mamá, que si fuiste capitana de las selecciones, pues igual, ¿y qué? Pues, chica, pues que eso en aquella época tenía que ser importante y tal.

Pero sin darle ninguna importancia, ir avanzando, ir avanzando y tú has avanzado en tantísimas cosas.

Además en el equipo de tu barrio.

Sí, sí, efectivamente.

Porque tú vivías allí, te fuiste al polideportivo, no sabías ni qué edad tenías, eras una niña y les dijiste, quiero jugar al balón humano.

Bueno, yo creo que fuimos todas las amigas.

Empezamos como en el colegio y entonces, pues bueno, el profesor de turno, que era como entonces se empezaba, era alguien que le gustaba el balón humano y ahí empezamos todas.

Y en mi colegio yo recuerdo que solo había balón humano y, bueno, y luego los chicos que juegan a fútbol y las chicas, porque yo también jugaba a fútbol con mis amigas.

Sí, sí.

Pero al final te quedó el balón humano a ti, ¿no? Sí, sí.

Podía haber sido de alguna manera, podía ser la elección por otro lado.

Pero bueno, entras en el Corte Blanco Videvieta en 1990 y desde ahí no has parado.

No, no.

¿No hay días en los que dices, ostras, chica, es que igual es momento de… que va, pero si tú eres muy joven todavía, si es que… Bueno, cada vez menos.

¿Qué dices? Eres muy joven.

Vamos a pensar aquí que eres muy joven.

Y hay días en los que has pensado, esto es demasiado ya.

Mira, cuando he jugado nunca he pensado, jamás he pensado eso.

Nunca.

Pero sí que es verdad que en la gestión ha habido años complicados y, bueno, y al final es otro tipo de presión.

Bueno, pues partimos de que somos un club que creo que somos ejemplar no solo en lo deportivo, sino en una manera de hacer las cosas.