Inteligencia artificial y el futuro del retail en Latinoamérica | RWS 2025

Soy Daniel Lacalle, Doctor en Economía, Profesor de Economía Global y Gestor de Fondos de Inversión.

Soy el Consejero Delegado de Alpha Strategy Consulting y también autor de varios libros, el último, El Nuevo Orden Económico Mundial.

¿Cómo deben prepararse los canales de distribución en América Latina para enfrentar los efectos del nuevo entorno económico global en el retail tecnológico? Los canales de distribución son mucho más complejos y mucho más tecnológicos de lo que normalmente se estima por parte de los economistas de consenso.

Lo importante para los canales de distribución es utilizar al máximo la inteligencia artificial, la tecnología y la información que tienen sobre los niveles de sobrecapacidad y las necesidades de capital circulante de los competidores para atender a las necesidades de los consumidores de la manera más eficiente y sin caer en los errores del pasado que eran fundamentalmente los de almacenar de manera demasiado agresiva.

Por lo tanto, tecnología, información y eficiencia unida a la gestión de inventarios junto con la tecnología y, por supuesto, la inteligencia artificial ayuda muchísimo en ese sentido.

¿Qué oportunidades estratégicas deberían estar aprovechando los fabricantes y distribuidores en la región para convertir la volatilidad económica en crecimiento sostenible? Los operadores deben darse cuenta de que las noticias que recibimos cada día están nublando la visión del futuro que es muchísimo más positiva de lo que muchas veces se ve en los medios de comunicación.

La región tiene un potencial económico absolutamente espectacular y lo que es indudable es que en los próximos 10-15 años la transformación del consumidor, la transformación de los hábitos de compra y también del tejido empresarial va a ser espectacular.

Por lo tanto, para lo que hay que prepararse es para esos enormes retos que se generan pero sobre todo viéndolo como una oportunidad y aprovechar que vamos a vivir en un entorno de tipos de interés muy bajos y además de enorme expansión monetaria para invertir de manera adecuada para aprovechar ese crecimiento potencial que claramente es de los mayores de las grandes economías.

Desde tu perspectiva, ¿cómo se redefine el concepto de eficiencia en las cadenas de suministro tecnológicas post pandemia y con la presión de la digitalización? La eficiencia en las cadenas de suministro hay que medirla claramente por las necesidades de capital circulante.

Yo creo que una de las grandes lecciones de la pandemia ha sido precisamente que las cadenas de suministro han demostrado ser muchísimo más sólidas, muchísimo más eficientes y que tenemos una serie de herramientas que nos permiten continuar haciéndolas más eficaces desde la tecnología.

Lo más importante, por lo tanto, es no caer en la trampa de las necesidades de capital circulante que lo que llevan es a que empresas que no tienen deuda quiebren a pesar de no tener deuda.

Y yo creo que lo más importante es no entrar en un entorno de competencia a ver quién pone los precios más bajos, sino liderar vía valor añadido y, además, minimizar los costes de almacenamiento y los costes de transmisión y de distribución.

¿En qué momento cree que empezó a evolucionar el retail en Latinoamérica? Bueno, yo creo que el retail está evolucionando constantemente.

No podemos decir que ha habido un momento porque es un proceso constante de evolución.

El retail ha pasado de ser, bueno, pues una experiencia unívoca en la que se ponía en una alacena un producto esperando que alguien pasase y lo comprase a ser una experiencia completamente distinta y continúa cambiando cada día.

En los últimos años se ha hablado muchísimo del concepto de shopping en vez de buying.

Pero ahora estamos ya en otro entorno completamente distinto en el que, además, la experiencia de valor añadido se marca dentro de unas opciones que pueden ser online, que puede ser en la propia tienda, etc.

Por lo tanto, es un proceso de cambio constante.