Japonizados Podcast - El viaje soñado a Japón (Parte 2)

Bienvenido. Estabas escuchando el podcast de Hoppe Nozaro.

Llegamos a Kioto, teníamos el tren Bala Shinkansen a las 10 y media, que ya estaba comprado desde España con Smart X, y pillamos asientos en Green Car, la clase, no sé si decirlo, clase business del tren Bala. Súper bien, con uno ZOMI.

¿Notaste diferencia entre la clase normal y la Green Car? La Green Car buenísima, para mí la diferencia de precio con descuento vale la pena, creo que eran unos 15 euros de diferencia respecto al vagón normal, y por lo ancho de los asientos, lo cómodos que eran, lo blanditos que eran, yo creo que sí vale la pena.

Sí, ahí estaba súper bien, como en un sillón de estos de casa, que te lo tiras hacia atrás y levantas las piernas, vamos, de puta madre. Y las ventanas, de Tokio a Kioto, ¿verdad? De Tokio a Kioto, además elegí el asiento a la derecha para poder ver el monte Fujiyama y lo vimos, y salió un día despejado, y se vio súper bien, ¿eh? Sí, la verdad que sí, porque estaba todo muy raso el cielo azul, e hicimos un montón de fotos cada vez que pasaba ahí, chao, chao, chao, foto, foto, foto.

Sí, sí, sí, muy chulo, la verdad que yo lo recomiendo principalmente por el descuento, yo creo que sí que vale la pena, habría que valorar ya si con precio normal vale la pena o no, eso ya he picnicado, pero para mí con descuento valió la pena, o sea, para nosotros, sí, sí. Y nada, llegamos aquí yo todo el mediodía a la 1 menos cuarto, el check-in del hotel era a las 3, creo que llegamos un poquito antes, no recuerdo si nos dejaron meter las maletas o nos las guardaron, no sé, y luego de ahí creo que nos fuimos a ver el templo Higashi Onganji, ese que es tan grande que había muchas piedrecitas y muy chulo, pero después de eso fuimos a, sí, mercado, creo que mercado en Ishiki y esa zona, la zona del río y todo eso, pero yo ahí recuerdo, no sé si tú también, yo estaba cansado ese día, y eso que no hicimos mucho. Ya, pero es que llevamos ahí 3 o 4 días que fuimos a tope, entonces ahí ya como que el cuerpo se relaja un poco y dices, ostras, estoy cansado.

Yo lo noté también, yo tenía un plan muy ambicioso ese día para recorrer, para parar en varias estaciones, me cogí un bono para todo el día de JR East para poder subir a la Yamanote y bajar todas las veces que quisiera y seleccioné unas estaciones que pues me atraían, que no es lo típico que sueles hacer cuando viajas una primera vez a Tokio, y tenía previsto parar en 8 estaciones, creo que fueran, y al final, ni de coña, llegué a parar en las 8 estaciones.

Claro, claro.

Sí, sí, sí.

O sea, empecé muy bien a mediodía, o sea, por la mañana a mediodía y después de comer dije, mira, no, vamos a completarlo, vamos a acabar el día dignamente.

Que no puedo.

Claro, sí, sí.

Fuimos ahí donde dice Juan Ángel, al río ese, que es donde estuviste con Karina, creo que me dijiste, y ese palacio ya no entramos, o sea, llegamos un poquito a entrar, dimos la vuelta y nos volvimos a salir.

No, es que ese día nos lo tomamos más con calma, sí.

Vimos eso, vimos un poquito del mercado y ya luego fuimos al hotel, creo que ese día fuimos al hotel pronto, ya para descansar y eso, porque ya el día siguiente empezaban los días de ir a ver el templo Kiyomizudera, hacer ya cositas, de ver bastantes cosas.

Claro.

Claro.