La juventud cubana fue protagonista principal en la victoria de Playa Girón

SIGRACIA, BUENOS DÍAS El 17 de abril de 1961, fueron las primeras acciones conjuntas de la Fuerza Aérea y la Artillería durante la invasión a Playa Irón.

Por ello, se eligió como la fecha de la fundación de la DASFAR.

El artillero de la unidad de 122 milímetros, Alfredo González Machado, la escolta de Fidel Amador Acosta Guerrero, y los infantes Digno Acosta Valdoquín y Alfredo Lacrés Rodríguez, sostuvieron que en la madrugada de aquel 17 de abril de 1961, el aviso de un miliciano que hacía su guardia en la costa de Playa Irón confirmó lo que se esperaba.

Había comenzado la invasión a Cuba de tropas mercenarias con apoyo de los Estados Unidos y Cuba amaneció en pie de guerra.

En ese amanecer se completó el objetivo de la Operación Pluto, como lo denominó la Agencia Central de Inteligencia y el Pentágono de los Estados Unidos, cuando la Brigada 20-06, integrada por 1500 hombres bien armados y con el apoyo aéreo, desembarcaron por dos puntos, Playa Irón y Playa Larga.

Pero la respuesta cubana fue inmediata con la movilización de los batallones 339 de Cienfuegos, los de Matanza, el batallón de la Policía Nacional Revolucionaria, y las baterías artilleras del ejército rebelde bajo el mando del líder histórico comandante en jefe, Fidel Castro Ruz.

Bueno, nosotros estábamos encogidos en la guarnición de Fidel y en la escorte, y ahí Fidel habló con el comandante de los sabores y le dijo que preparara el batallón para salir para el Centro Australio, y ahí salimos, pero con el batallón no estaba completo, lo completamos en Matanza, en la escuela de la milicia, y ahí salimos para el Centro Australio, y cuando Fidel llegó, le dijo al saborí, al comandante Ramón Pardo Guerra, que era de los jefes de los tanques, que fuéramos para Playa Larga, y que la señal era, cuando llegáramos allá, que Ramón tirara un tiro en el tanque, un cañonazo, para saber que habíamos llegado, y así lo hicimos, y de ahí fue el desembarco, que aquello no fue fácil, el primer avión que voló por arriba de nosotros, era un 26, y tiroteó tres veces, y a la cuarta vez, que estaban a 14,5, tenía los pies desbaratados, y entonces llamó a un compañero de él que le ayudara a colimar el avión, y así lo hizo, y cuando lo colimó, le tiró un refragazo, y empezó el avión a dar vueltas, y el motor se fue, cayó por un lado, y él se trayó en el campo caña.

A unos tres kilómetros de San Blas, ahí estaba el puesto de mando de enemigos, y empezamos a hacerle fuego, desde esa hora, hasta por la mañana, que empezaron a retroceder, porque la ofensiva nuestra era delante de nosotros, con esos cañones, que eran 122 milímetros, y encima de la batería mía, estaban los 152 milímetros, y delante de mí, estaban los morteros, y la infantería, y eso fue sin tregua, hasta que nos pusimos a San Blas, y volví a empezar la artillería, para tirarnos para la playa, donde estaba el enemigo.

Entonces el jefe de nosotros nos dio la idea, bueno, a desplegarse por toda la playa, y él salió también a recorrer.

Nosotros salimos de Managua, y llegamos al central de Australia, como a las siete de la mañana, y ahí nos sorprendió un avión, un B-26, y entonces allí nos hirió unos cuantos, y cuando el avión se derribó, que lo tumbaron, los antiaéreos, al poco rato nos dieron la orden de partir para Playa Larga, porque estaba Playa Larga, y después estaba Playa Gerón, y entonces cuando íbamos en el camino, ya hemos caminado como 10 o 12 kilómetros, entonces nos paramos, porque el terraplén estaba minado, y para acá, para la izquierda, estaba la ciénaga, y para la derecha, el mar, no podíamos avanzar, estábamos parados allí esperando órdenes, y en eso llegó Fidel allí con su escolta, como era el enérgico, llamó a, ¿dónde está Roger?, y Roger le dijo, aquí, comandante, ¿qué pasa que no avanza? No podemos avanzar, porque eso está minado ahí, y entonces dice Fidel, denme cuatro suicidas, porque en la guerra los zarpadores son suicidas, fueron los cuatro, y de los cuatro vinieron dos, mataron dos allá, porque había un observador arriba de un tanque, y el observador pitó que iban a cortar los cables de las minas, y le abrieron fuego, y mataron dos, pero cortaron los cables, y se presentaron acá donde estaba Fidel, y donde estábamos nosotros, y dijo, ya podemos avanzar, que ya todo eso ya está eliminado, de matar, de vengar, y de vencer, cuando Fidel llegó, le dijo a Saboria, comandante, que vamos a partir para las dos guerras de los tanques, que volvemos para allá, y que la señal era, cuando llegamos allá, que lo tiramos a la sellilla, Y cuando Fidel llegó, le dijo a Saborí, al comandante Ramón Pardo Guerra, que era de los tanques, que fuéramos para Playa Larga, y que la señal era, cuando llegáramos allá, que Ramón tirara un tiro en el tanque, un cañonazo.