Las Mañanas 21-04-2025 Hablamos de proteger tu viaje. Nos lo cuenta Miguel Ángel de Segurorsa

Yo no sé… Claro, el Rafín ganó este fin de semana.

Me dice… ¡No me tires de la lengua! Basta que me lo digas.

Y yo pues voy… No sé si a la herida.

No cagas, el Rafín ha ganado.

Vamos a partir de la base, que nos alegramos por la victoria.

Eso sí, nos costó ganar contra ocho, pero ganamos.

Eh… Miguel Ángel, buenos días.

Buenos días.

¿Cómo eres? De verdad, buenos días a ti y a todos.

Pero ganamos… Nos costó, porque el fútbol cuesta todo, pero ¿ganamos o no? Sí, hombre. Ganamos, ganamos.

Y con tres goles frente a uno.

¿Golín? Sí, ganamos, ganamos.

Pero una cosa es decir… Hemos ido fuera, hemos ganado uno-tres y luego lo excepcional del partido… O sea, es una cosa increíble.

Hoy leía, creo recordar, que el Rafín lleva seis partidos perdiendo los primeros diez minutos.

Sí, sí. Faltaba concentración inicial, eh.

Y atención… Claro, ¿y eso de dónde sale? ¿Del banquillo? Igual hay alguien que los tiene que empezar a comer o a dar pollejas, porque no puede salir tan flácido.

Vamos a ver.

Si aspiramos a estar en la pomada entre los líderes de una división, ojo, de una liga, eh… Y con los equipos que hay.

Eh… Que se está viendo fútbol, ¿eh? Pero, bueno, el partido del otro día venían al choque y nos querían reventar antes de acabar el primer tiempo, porque fue una culpa del árbitro.

Pero a lo que te voy, que es un partido que es muy difícil de comentar, admites muchas… Pero lo que yo sí quiero hacer, eh… un poco, eh… Tensionar un poco, vamos a ver.

¿Cómo puedes, en una liga, seis partidos que en los primeros diez minutos están con la un gol? Eso hay que corregirlo. Es falta de tensión, es falta de salir, no sé… Concentración.

Parece falta de… Parece falta de concentración.

Es mi sensación.

Puede ser la palabra.

Pero ¿qué falta de concentración? Es un trabajo, eh… De vestuario, un trabajo de preparación previa.

Pues lo mismo que yo pienso.

Lo que llevo diciendo desde el primer día, desde hace mucho.

Falta, falta, falta ese… Esa tensión, esa preparación, esa… Esa mentalización.

Llámalo lo que quieras, pero es que volvemos… El partido de ayer, yo de verdad, le doy por bueno, se ganó, hemos sido lesionados, bueno, la tarjeta última hora de la movida de este chaval de Arana, que intenta investigar y no hay manera de saber qué es lo que ha pasado.

Lo han tapado, eh.

Pero por dentro, hablando con gente… Me cuesta trabajo creer que el entrenador en rueda de prensa no supiera nada, eh. Me cuesta trabajo creer eso, eh.

Bueno, a mí me cuesta creer, pero hay alguien próximo y cercano, de allí, de dentro, que me afirman y confirman, dice, o sea, se lo ha callado. La verdad que este chaval es bastante reservado y tal, en fin.

Quizá algún día lo sepamos, a mí me dio una pena terrible ver a un chaval ahí llorando.

Bueno, pero vamos a pasar el partido de ayer, porque lo mismo que les pasó el partido que jugamos en casa, el último, que es que nos pegamos media hora, que no nos movimos, salimos en casa, que es lo que yo te comenté el otro día, un poco en gracia, si la gente se recuerda, yo creo que les hicimos el paseillo cuando salieron del hotel y les sacamos asustados, llegaron al campo asustados y el otro equipo nos comió.

Pues aquí ha pasado lo mismo, hemos salido un poco mejor, porque sí es cierto que hemos salido con una idea clara de ir a por el partido.

Sí hemos salido mejor, sí hemos salido bastante mejor.

Pero, a uno que tuvimos en casa que fuera bueno, pero correr corría, correr corría, le metes de marca, con todo mi respeto, a Samantilla, que es un fenómeno que yo le quiero en el alma, me parece un jugador para mí, para mi equipo, siempre, pero sale de una lesión muy grave, ha estado mucho tiempo parado y está muy lento, está muy, muy, muy lento.

Le metes en marca al que ya conocemos, claro, en cinco metros le sacó cuatro.

Se le fue, se le fue con una defensa súper adelantada, que sí, que aquí era por el partido, pero compañero, es que el otro equipo también te ha visto y también hace un planteamiento, y meta dos tíos rápidos arriba que ninguno de los cuatro defensas que tenemos era capaz de aguantarle en carrera a ninguno.

Entonces, hay que tener un poco cuidado y más si vas a jugar fuera.

No sé yo, no soy yo quien para decirte si hay que salir en los primeros tres o cinco minutos a ver qué es lo que va a hacer el otro equipo o salir desde el primer momento a morder.

Yo creo que en casa sí, yo creo que el planteamiento de casa es ni un tono hay que salir a morder, porque tienes a 20.000 tíos gritando, animando, y tú al otro equipo le tienes que meter ese miedo escénico.

En los primeros cinco minutos es decirle, macho, estás en Cantabria, estás en el campo de los 120 años que llevamos de un equipo de primera división y por circunstancia yo no es mucho aquí, pero os vamos a morder y os vamos a comer.

Y cuando eso se lo haces a un equipo que viene, luego te podrá ganar, pero ya, cuidado, cuidado.