Las Mañanas de Onda Aragonesa, "Angelito el Largo" (13/05/2025)

Los Porches del Audiorama, tu centro comercial en La Romarena.

Bueno, cuéntanos, Angelito, cómo estamos por Madrid, vamos a ver.

Pues mira, de momento vamos tirando y de fútbol no hablemos mejor porque, madre mía de mi vida, vamos a esperar al año que viene a ver qué pasa.

Bueno, es la paciencia, paciencia y tiempo. Nos hemos acordado de ti, ¿sabes por qué? Porque hoy es el día del Gin Tonic.

¡Hombre, hombre, hoy sí que es nuestro día! Y ahí sí que he dicho ¡hombre! ... de copas contigo y que lo pidieras así. ¿En los bares lo pides así? ¡Hombre, claro, por supuesto! Me encantaría, de verdad, Irene, a que te irías con él de copas. Se te oye con eco por todo, Irene. Ahora mismo está el estudio lleno de ti, Irene.

Irene se tiene que venir con nosotros de copas.

Hombre, con la Irene ligamos seguro, te lo digo yo.

Sería nuestro reclamo ella.

No, no, no, con la Irene ligáis seguro.

Ya te digo yo.

Me parece a mí que sí, que con la Irene vais a ligar las dos seguro.

Yo como siempre, pues nada, os animo a llevar cuidado. A la más mínima vez que he visto un WhatsApp, ¿vale? Esta mañana siempre me ha pasado lo mismo.

Si vais a ligar seguro.

Anda, anda, que luego... que vas de cara vina, de cara vina.

No, no, de cara vina no, de cara fea, me canso.

De cara divina.

¡Ostras, madre mía! Yo la última vez que ligué pagué en pesetas, o yo qué sé.

Sí, sí, yo nada, yo...

A la Irene le da una risa, le da una risa que vamos con esto.

A ver si un día la veo, cuando haga la videollamada y que funcione.

Esto está siendo Eduardo de Pisa nos ha hecho pirola, no lo tenemos aquí.

No sé, este hombre, de verdad, nos ha dejado aquí, claro.

Es que le volvemos loco tanta mujer, yo pienso que no quiere...

Menos mal que tú, Angelito, nos aguantas, aunque seamos mujeres.

Yo, yo cuando de cura decía y bendita tú eres, yo ya estaba entre todas las mujeres.

A mí compañía femenina, que para masculina están otros y menosculino soy yo, que tengo menos culo que una mandarina, ¿sabes? Yo soy menosculiente, yo soy...

Menosculiente.

Hay mujeres que son masculinas y otras que son masculonas.

Bueno, pues yo soy menosculón.

Sí, sí, sí, yo estoy en las segundas, sí, sí.

Bueno, oye, de todo tiene que haber, a ver, en la viña...

A mí es que me gustan las segundas, las masculonas.

A mí cuando vienen que están tan buenas y no sé qué digo, ya, déjalo, déjalo.

Déjalo, que no sabe dónde agarrarse uno.

Mira, antes hemos hablado del vampiro este, de la película esta, del Crepúsculo.

Ah, Crepúsculo, es verdad, mira.

El Eduard Kulen, todo culo, ¿verdad? Claro que Crepúsculo, Eduard Kulen, la masculina, masculona, mandatito.

Con esto, con esto nos da para hacer un sketch o algo, ¿eh? Nos da para hacer un año de misión.

Sí, totalmente.

Pues total, que estábamos hablando del chico este, el vampiro, y decíamos, Irene y yo, pues este chico, si es que no hay ni por dónde cogerlo, todo blanco, delgado, tal.

A mí esto no, no, no.

Madre mía, es verdad, más blanco que el pensamiento un lechero.

Esa gente no me estaría que mover.

Pero, coño, yo se lo digo, digo, pero muérdele la teta a una vaca y saca leche, que es proteína.

No vayas a morder sangre humana.

Ay, de verdad.

Que no estamos, que no estamos hechos para que la sangre humana nos nutra.

Que no, que eso, es que, es que.