Manuel Pastorino en La Silla 🪑(3x01)

Estás escuchando La Silla Podcast Con Belén y Manu ¿A quién no le va a gustar? Bueno, pues sin más dilatación, parece que esto ya está grabando.

Nuevo formato de La Silla, ¿no, Belén? Pues sí, aquí estamos y con más nervios de lo habitual, porque a ver si sale bien el experimento.

Bueno, y si no, pues lo repetimos otro día. ¿Y con quién estamos hoy? Bueno, igual si esto se ve en la pantalla ya se ha hecho spoiler, pero hoy con nuestra silla plegable nos vamos de viaje.

Ni más ni menos, nos llevamos la silla a cuestas, a Tierras Levantinas.

Estamos con Manuel Pasturino, aquí presente.

Natural de Chipiona, Cádiz, aunque migró para Tierras Levantinas, como ya he dicho.

Es el chico de las manos de oro.

Y bueno, Manuel, preséntate.

Sí, yo creo que se explica más por lo que tienes detrás, lo de las manos de oro.

Pero bueno, preséntate tú, cuéntanos un poco quién eres, a qué dedicas el tiempo libre.

Bueno, bueno, bueno.

Hola, Belén. Hola, Manu. Pues claro, aquí encantado y me llena de orgullo y de dilatación.

Poder estar aquí en la silla sentado, aunque sea mi silla tal cual, pero virtualmente es la silla de todos.

Y bueno, preparado y listo para echarme un Manu a Manu con Manu. Nunca me he hecho.

Y bueno, a ver qué me presentes. Bueno, pues soy yo. Hasta luego.

No, hombre, no. A ver.

Los que son oyentes de aquí, del podcast, seguramente me habrán escuchado porque también colaboro en el podcast de Frikilosofía, que es un podcast hermano de aquí, de la silla.

Soy uno de los colaboradores que envía sus audios en casi todos los programas y seguramente me conoceréis por eso.

Y también porque desde hace un tiempo para acá, pues tengo una extraña afición. Siempre he tenido inquietudes artísticas.

Siempre me ha gustado expresar mi arte en diferentes maneras, dibujando cómicas, haciendo murales en el pasado.

Y actualmente, pues desde 2017, llevo un tiempo que lo que hago es transformar o customizar los típicos maniquíes de dibujo que se usan por parte de los pintores, por parte de los dibujantes.

El maniquí clásico de unos 30 centímetros que es de madera, que se usan para calcular las proporciones del cuerpo humano, para calcular o para saber la gestualidad, para hacer dibujos, para hacer bocetos de lo que es una figura humana básica.

Pues este maniquí clásico, no los modernos que hay ahora, sino el clásico de madera, que está aguantado en un palito metido por donde la palabra tiene su nombre y una base redonda.

Pues estos maniquíes los uso y los transformo de manera artesanal usando diferentes materiales en personajes populares del mundo friki, del cine, de la televisión, personas reales, famosos, etc.

Y bueno, eso es lo que estoy publicando en mis redes desde hace ya un tiempo, en TikTok, en YouTube y en Instagram bajo el nombre de o bien Manuel Pastorino o bien Manicarte con Q de Maniquí.

Que desde ya os decimos que le sigáis, quien no lo conozca, quien no lo siga, porque es que de verdad da gusto ver las figuras.

Y además como nos cuenta sus trabajos, o sea que da gusto todo, lo que hace y como lo cuenta.

Bueno pues Manu, hemos decidido Belén y yo que vamos a elegir cada uno de nosotros, y tú también, tres figuras.

Va a empezar Belén con sus tres favoritas.

Vale, la primera la tengo clarísima porque desde que la vi me enamoré, que es Alien.

Alien, o sea, qué pasada es eso, qué barbaridad.

Y encima tienes la comparativa del primero que hiciste y el siguiente.

Y es que es una pasada, es que es alucinante ese el primero, lo tengo clarísimo.

Claro, cuando me dijo Manu, vamos a elegir tres, y le dije yo solo tres.

Pero bueno, el de Alien lo tengo muy claro.

Luego, Anakin en el tanque, por favor, qué es eso.

Qué barbaridad, qué barbaridad es esa.

Y luego el tercero no tiene ya nada que ver, pero es que también me enamoró.

Fíjate que no es un personaje que a mí me haya gustado así especialmente nunca, pero es que yo qué sé, es que está tan bien la Pantera Rosa.

Es que me enamoró.