

Description of Marina Di Rocco - 07/02/25
Hablamos con Marina Di Rocco, Sommelier egresada de la Escuela Argentina de Vinos (EAV), sobre el consumo y la producción de vino en Argentina.
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21 minutos pasan del mediodía sin ningún tipo de preámbulos.
¿Te había anticipado que se venía una nota para hacer un chinchín?
Bueno, y acá está. Vamos a saludar a Marina Di Rocco,
sommelier egresada de la Escuela Argentina de Vinos.
Marina, muy buenos días. Qué placer saludarte.
Gracias por este tiempito con Delta.
Hola, ¿qué tal? Pablo, ¿cómo estás?
Muy bien, estoy muy contento. Tengo ganas de hacer chinchín.
Me encantaría que estés acá para hacer una cata.
Eso podríamos programarlo en algún momento.
Mira, yo lo que aprendí del mundo del vino que me apasiona,
he llegado a conclusiones. Te voy a decir para mí la conclusión fundamental que llegué.
Cuando te preguntan cuál es el mejor vino, ¿cuál es el mejor vino?
Y yo siempre digo, el que te gusta a vos. ¿Me equivoco?
Es una conclusión totalmente correcta y, en definitiva, es así.
Todos tenemos gustos diferentes.
¿Te pueden servir el vino más caro del mundo?
Que si no te gusta, no te gusta, no importa cuánto valga.
Así que la conclusión tuya, Pablo, es espectacular.
Bueno, a ver, contame un poquito.
Yo, por ejemplo, soy fanático de los vinos reserva, de los vinos añejados.
Soy fanático del vino tinto.
Tengo que salir un poco de mi zona de confort.
Salir de mi zona de confort significa tirarme algún vino blanco, algún Merlot, algún Chardonnay.
En la Argentina, ¿está tipificado cuál es la cepa que más consumimos?
Bueno, yo, obviamente, la cepa que más consumimos es la Malbec.
Es la cepa más implantada y es la cepa que, de alguna manera, en la Argentina se dio muy bien.
Tiene un origen francés, pero en la Argentina se dio espectacular.
Y somos incluso reconocidos en el mundo por la Malbec.
Cuando nosotros exportamos vinos, dicen, bueno, Argentina, Malbec.
Pero la realidad es que está muy bien lo que decís.
Porque hay que salir de la zona de confort porque la Argentina tiene cada vez mejores vinos, mejores cepas.
Estamos teniendo muy buenos vinos blancos, muy importantes, muy competitivos,
parecidos a los que existen incluso en el viejo mundo, en Europa.
Así que, bueno, la realidad es que puedes encontrar vinos Cabernet Sauvignon espectaculares.
Puedes encontrar, como decía Chardonnay, buenísimos, incluso rosados.
Cada vez tenemos vinos más complejos los argentinos.
Hay que salir de la zona de confort porque hace calor.
A veces comemos algún tipo de comida que con un vino tinto, viste, por ahí no combina muy bien.
O por ahí tapamos la comida.
Así que creo que lo ideal es lo que vos decís.
Salir un poquitito de esa zona de confort y probar lo argentino.
Lo que hay, que hay mucha variedad, mucha diversidad y es muy rico.
Y además me imagino el orgullo que debes tener vos, primero como amante del vino, como sommelier,
de cómo la radiografía, el mapa del vino en Argentina se ha extendido.
Porque yo recuerdo cuando tuve mi primer encuentro con un vino de Salta, que me enamoré.
Y dije, guau, pero si yo pensaba que los vinos son patrimonio de Mendoza.
Y no, hay vinos en Salta, hay vino en Catamarca.
Es increíble cómo se ha extendido, ¿no?, el mercado en la República Argentina.
Sí, vos sabes que la Argentina tiene que ver un poquito con algo que tiene que ver con la historia.
Porque en un momento estuvieron algunas provincias, particularmente que eran vitivinícolas,
estuvieron cercenadas, por ejemplo, Entre Ríos.
Era muy vitivinícola, se hacía mucho vino y un día un presidente dijo,
chau, esta provincia no es más vitivinícola, sacamos todas las bodegas, las plantas,
erradicamos todos los viñedos y no se hace más vino acá.
¿Qué presidente fue, perdón?
Juan Pejusto, Agustín Pejusto, en 1935 sacó una ley que se prohibió esto.
Te digo que fue terrible porque en Entre Ríos, doy como ejemplo porque era en los Buenos Aires,
bueno, en todos los lugares, pero en Entre Ríos tenía casi muchísimas bodegas.
Todo, todo eliminado.
Entonces, un poco por la presión obviamente de los productores de Cuyo, de San Juan y de Mendoza.
Los argentinos, hace muchos años que pensamos que solamente es posible el vino en esa latitud,
o sea, cerca de la latitud 33 y al lado de la cordillera.
Pero ahora descubrimos que no, obviamente, porque copiamos al resto del mundo
y hoy tenemos vinos, yo te puedo decir, si yo te iba a la provincia de Buenos Aires,
que estamos acá, vos no lo puedes creer, o sea, hay vinos acá en Campana,
tenés vinos en Valcarce, tenés vinos en Tandil, tenés vinos en Chapalmaral.
¡Es impresionante!
¡Qué lindo!
Muy, muy interesante toda la diversidad y bueno, hay que probarlos todos.
Marina, ¿cómo estás? Hola, Jasmine. Bueno, a mí me encanta el vino.
Yo tengo 28 y hace 6 años aproximadamente dije, che, quiero que me empiece a gustar el vino.
Y fui de a poco educándome en este mundo porque, vos viste que hay mucho para aprender
y también explorar y ver qué le gusta más a uno y a otro.
Y me pasa mucho que hablo...