Mind the Ball 3x04 | Entrenamiento de los Denver Broncos y entrevista a un ex-quarterback

Mind the Gap.

Meet the Ball, el podcast del capologista desde Londres.

10 de octubre, Londres, las seis y media de la tarde y anoche.

Noche casi cerrada en la ciudad de Londres.

Más concretamente, cercanos a Fishbury Park nos encontramos.

¿Episodio? ¿De qué temporada estamos hablando, Ander? Tercera temporada, cuarto episodio de Mind the Ball en el capologista.

Estamos yo por segunda vez cubriendo un partido en Londres. ¿Y tú, primera vez? Por primera vez, efectivamente, Álvaro. Me he sentido en mi salsa.

Tú me has visto, tú me has visto.

Primera toma de contacto, primera experiencia en el entrenamiento de los Denver Broncos.

Absolutamente fabulosa. Todavía nos quedan dos días y una noche más por delante.

La verdad es que muy, muy bien hasta ahora en este partido de la NFL Internacional en Londres.

Totalmente. Día ajetreado.

Día muy ajetreado, Álvaro.

Día muy de maratoniano.

Efectivamente.

Incluso te diría más que de 100 metros lisos que de maratoniano.

Efectivamente, efectivamente.

Porque tú y yo, Álvaro, teníamos el plan ya diseñado.

Nos fuimos a dormir, tenemos tiempo de sobra, hemos vuelto pronto.

Y planificamos todo por la noche para saber a la hora que nos tenemos que levantar.

Incluso nos despertamos antes.

Bastante antes.

Y por las siete y media de la mañana estábamos ya despiertos.

Inédito para Ander y Turralde.

Inédito para Ander y Turralde.

Y claro, ¿qué pasa? Pues yo me ducho, tú te duchas, estábamos de chill, no tenemos prisa ninguna, vamos sobrados de tiempo, sabemos a dónde hay que ir, qué tren, qué autobús, todo.

Lo teníamos todo medido al milímetro.

¿Qué pasa, digamos, unas dos horas y media, menos de tres horas antes de que comience el entrenamiento de los Denver Broncos, Álvaro? Pues que yo recibo un mail, era como diez minutos, quince minutos antes de salir.

Íbamos a salir para coger o bien el metro, o bien el tren, o bien el autobús que teníamos pensado porque teníamos diferentes rutas.

Eso es verdad.

Para lo que era Tottenham, que era donde se iba a celebrar el entrenamiento en la ciudad deportiva del Tottenham.

Eso, en Anfield, que es todavía más al norte de lo que es el estadio.

Exacto. Entonces, pues bueno, teníamos ya medido hacia dónde teníamos que ir.

Sitio nuevo para la NFL, creo, nunca habían estado en la ciudad deportiva del Tottenham entrenando y yo desde el año pasado, incluso Paco, que lleva más años viniendo, me había comentado que no era la primera vez que iban a la ciudad deportiva del Tottenham, pero para nuestra casualidad recibimos ese mensaje maravilloso, correo de mi amigo, el cual no me acuerdo del nombre, pero le doy las gracias encarecidamente.

Gracias, de verdad, gran ayuda. Me cago en todo.

Nos ha salvado.

Nos ha salvado.

Nos ha salvado, o sea, ha sido estresante y podríamos decir un millón de veces, pero ha sido estresante y lo hemos clavado.

Hemos recibido un correo en el que ponía que cambiaban la dirección del entrenamiento.

La misma mañana. Dime una cosa que ocurre por la mañana, Álvaro.

La misma mañana, tipo una hora y media antes del entreno casi, o sea, una hora y dos horas.

Dos horas y media, lo que decía antes, más o menos.

Pero claro, es que nosotros para llegar a...

Claro, claro, pero para llegar, estamos muy lejos.

Claro, o sea, para lo que es Tottenham, en la ciudad deportiva tardábamos una hora y diez, quince minutos.

Para llegar a Wer, que era donde se ha realizado finalmente el entreno, tardábamos dos horas.

En tren, o sea, yo tenía claro por dónde había que ir en ese caso, porque había ido el año pasado, era donde había acudido, y sabía por dónde ir, pero sabía que era un peñazo.

O sea, ir a coger un tren, estar una hora montado en un tren, después llegar a un pueblo, que es Wer, y ahí puedes buscarte la vida y bien un autobús o bien un Uber, porque andando tardabas mucho.

Entonces, yo tenía muy claro que o cogíamos ese autobús, que muy bien, muchas gracias por esas facilidades que nos ha dado la NFL, que nos ha puesto un autobús.

Un minibus para la gente.

Un minibus para la prensa.

Sí.

Pero gracias a eso, hemos podido llegar con toda la prensa a Wer, al hotel donde estaba.

Efectivamente, que para poder tomar ese primer minibus inicial, hemos tenido que cambiar completamente la ruta, teníamos que ir al sur en vez de al norte, porque teníamos que tomar ese minibus.