No entiendo a mi mujer

Luis Rodríguez Rafa.

Hola, buenas noches Luis.

Y buenas noches, ¿qué tal? Bueno, pues aquí estamos.

¿Sí? ¿Cómo marchazo? Sí.

¿No vamos a ver? Con un pequeño consejo que me ha dicho...

No, intentamos.

Cuéntame, ¿cómo está la situación ahora? Pues, bueno, con el tema este de mi mujer, pues ya vamos a...

¿Sí? Vale, y bueno, yo, a ver, para mí he hecho ya todo.

A ver, no quiero dar por terminado nada, ¿no? O sea, me he movido todo lo que he podido a raíz de psicólogos y psiquiatras, ¿vale? Y bueno, viendo que no es que no dé resultados, sino que, bueno, pues mi mujer pues no tiene fuerzas como juntas y tal, y bueno, han dicho los médicos, bueno, que coja fuerzas, que no va a haber que no...

Realmente es que no tenemos ningún problema.

En el tema económico no tenemos ningún problema, o sea, yo estaba en paro a final de mes, llegamos justitos, pero llegamos a final de mes que no es poco, ¿vale? Y, pero bueno, ella pues todo lo ve mal, que si el tema del dinero, que si el tema de...

O sea, cada vez que pasa, pues por ejemplo, la cartilla por el banco es un suplicio cada final de mes.

¿Pero por qué es un suplicio? Pues porque sí, o sea, se come el coco por, pues...

A ver, yo te digo, no sé si debe ser por causa de que, bueno, ella es hija única, nunca le ha faltado de nada, pues ahora, pues, ya te digo, con todo el tema este de que si necesito esto, pues, he hecho nueve meses porque yo me quedé en paro y entre que estudiaba y tal, pues, los errores que teníamos.

Pero bueno, la cuestión es que ha sido para bien porque, bueno, ya hace nueve meses que estoy trabajando y con lo poco que gana ella y lo que gano yo, pues bueno, ya te digo que llegamos a final de mes, que esto no es...

Esto es una parte, ¿no? Una parte de...

Y que veo que no tiene fuerzas, ¿no? No tiene fuerzas de llevar tanto tiempo, pues, no queriendo saber nada de nadie y en su mundo, ¿no? Oye, Rafa, tu mujer está en una depresión, ¿no? Sí, sí, sí, claro.

Bueno, háblame de esto.

¿Qué dice el médico, el doctor? ¿Qué médico le visita, perdón? El médico era un médico, bueno, el último, un psiquiatra de la Clínica de Seus de Barcelona.

¿Qué dice el doctor? Bueno, de todas maneras es que, bueno, la última visita que hicimos a este médico es hace ya al menos cuatro o cinco meses, o sea, ya...

Pero ¿se está tratando ya esto? Se está tratando.

A ver, empecemos cuando fue estas consultas y tal, al principio ya te digo, ya te comenté que lo cogí con mucha gana, ¿vale? Pero no ha valido de nada porque estamos igual que hace tres o cuatro años.

O sea, estamos...

Pero ¿se está tratando, se está medicando? Se está medicando.

Pues se está medicando...

Ya te digo que le tengo yo que administrar la medicación porque...

Sí.

Porque...

¿Por qué? ¿Por qué no quiere? Porque no me atrevo a dejarle la medicación, o sea, ya mira...

Ya lo entiendo, ya.

¿Sabes? Mira, por ejemplo, hoy, ¿vale? Hoy tenía descanso y ella, los momentos puntuales que ha salido a la calle son momentos de que solamente lo puede hacer ella.

Por ejemplo, a sellar la actividad del paro, ¿vale? Que no tiene más remedio que salir ella frozosamente.

Y, por ejemplo, pues esta mañana ha tenido que arreglar unos papeles del instituto de la nena.

Sí.

Ya de primeras escuchar que se estaba vistiendo y todo esto a las ocho de la mañana.

Pues yo sé que, que, que...

Sabía que, que, bueno, que esto no...

A ver, lleva un par de días así que se levanta y tal, pero sabía que esto no iba a durar mucho.

Por lo tanto, luego ha venido sobre las diez o así y, bueno, ya llorando de que no estoy bien y que, por favor, que me ayudes y tal.

Pero he tenido que salir yo a la calle en un momento diez minutos, solamente han sido diez minutos.

Y cuando he llegado a casa ya me he encontrado cuatro tabletas de pastillas vacías y se ha tomado un montón de pastillas y en el momento que...

A ver, yo sé que estoy al tanto de esconder las pastillas o dejarles solamente las pastillas juntos.