Las noticias del día - 07/10/25

Recuerda que puedes escuchar este audio horas antes de su estreno y sin publicidad suscribiéndote en cesarvidal.tv Las noticias del día Estamos de regreso y estamos de regreso después de ese editorial que hemos dedicado a esa figura que ahora se conoce como el trabajador pobre, figura tristísima porque nos obliga a pensar que estamos seguramente en un ciclo histórico que de continuar con los pasos que lleva dando desde hace décadas puede acabar de manera muy trágica. Una de las consecuencias positivas porque hubo muchas terriblemente negativas, entre ellas la muerte de decenas de millones de seres humanos, pero una de las consecuencias positivas de la segunda guerra mundial es que la segunda guerra mundial derivó en una subida, en una mejora, en un ascenso de las clases trabajadoras en toda Europa.

En el caso de la Europa del Este, bueno, el caso de la Europa del Este, entre la Unión Soviética y los países que eran satélites de la Unión Soviética, las condiciones de los trabajadores en términos sociales llegaron a cuotas que desde luego en occidente seguramente no vamos a llegar a ver en vida y estamos hablando no sólo de los servicios sociales gratuitos, de sanidad, de educación, sin unas edades de jubilación muy bajas, una atención a las mujeres que trabajaban verdaderamente excepcional y en ese sentido pues digamos que la falta de bienes de consumo que había en buena medida para muchos quedaba compensada por el hecho de una serie de derechos sociales que tenían que ver con la educación, que tenían que ver con la sanidad, que tenían que ver con las pensiones y que incluso tenían que ver con la vivienda. Con esa amenaza que significaba el otro sistema, evidentemente en Europa Occidental donde lógicamente la guerra se había hecho sentir y se había hecho sentir también de forma devastadora, hubo que adoptar una serie de medidas que avanzaran en el progreso de los trabajadores y que los convirtieran en de manera masiva y acelerada en clase media y eso por dos razones.

Primero porque la gente no había estado pegando tiros en el frente para luego vivir peor o mucho peor de la situación anterior a la guerra que había sido una situación socialmente convulsa con una Europa dividida prácticamente entre fascismo y comunismo y en los dos casos por razones sociales. El comunismo era un socialismo de corte marxista-leninista, el fascismo era un socialismo de corte nacionalista pero en cualquier caso en ambas situaciones era obvio que existía una inmensa clase trabajadora a la que no se podía seguir explotando como se llevaba explotando desde hacía siglos. En Occidente esto implicó que la acción de unos sindicatos, en muchos casos sensatos, pero que cumplían con su papel de defender los derechos de los trabajadores, la inteligencia de las élites dominantes que se dieron cuenta de que no podían pretender seguir obteniendo la mayor parte del pastel a costa de los trabajadores y desde luego la conciencia de muchos de que las cosas no podían ser como antes de la Segunda Guerra Mundial provocó unas condiciones de trabajo que a su vez revirtieron unas condiciones de vida realmente extraordinarias.

Cuando estudiamos el siglo XX no serán pocos los autores que se darán cuenta de que la edad de oro del capitalismo no se vivió con la especulación financiera a la que tanto ayudó por ejemplo el presidente Clinton sino que se vivió en esos años del 45 al 73 casi tres décadas en que los salarios subieron, en que el poder adquisitivo de los trabajadores se multiplicó, en que lógicamente el consumo se multiplicó también porque había dinero en el bolsillo para consumir y eso lanzó en la economía a unos grados de producción y además de economía real que fueron verdaderamente impresionantes y que nada hace pensar que se vayan a repetir.

Épocas que algunos podemos recordar porque vivimos en la infancia, otros en edad más madura y donde efectivamente con un solo salario que entraba en clasa a veces con algún complemento del cabeza de familia pues las familias podían vivir y por primera vez en la historia enviar a sus hijos a la escuela.