La nueva realidad, la que quisiéramos crear

Hola, ¿qué tal? Bienvenida, bienvenido a este programa en el que seguiré abordando el tema de la realidad como lo he hecho en los programas anteriores, a través de entrevistas, a través de reflexiones.

Hoy es un nuevo programa sobre la nueva realidad, es decir, aquella realidad hacia la que nos estamos moviendo como humanidad y la realidad potencial que podemos crear. De hecho, como ya mencioné en un video anterior, hay muchas perspectivas y muchos pedacitos de la gran torta o de la gran realidad global, digamos. Pues mientras veamos las cosas desde nuestra percepción individual y separada de los demás, evidentemente que la realidad tomará la forma que la persona la dé.

Sin embargo, como también ya mencioné, hay bases que han creado sobre las cuales se ha edificado la realidad que son aceptadas por la colectividad.

Y había dicho que esas bases son las que tienen que transformarse para poder llegar a un nuevo lugar de desarrollo evolutivo.

Estamos sin duda viviendo una época distinta, tremendamente llena de energía, de un nivel de aceleramiento en todo que es muy característico de Urano, al menos desde la perspectiva astrológica.

Muy eléctrico, muy rápido y obviamente relacionado con la nueva era que nos estamos moviendo hacia la realidad acuario.

Más allá de estas percepciones astrológicas o de las percepciones de distintas fuentes místicas, sí hay realidades de otras dimensiones que trascienden la percepción individual y separada de cada ser humano.

Y un poco hacia allá estamos con el potencial de podernos movernos, es decir, hacia una nueva realidad en la que se pueda vivir con los conceptos que todos estamos buscando pero que no logramos como humanidad.

Es decir, libertad, amor, felicidad, alegría, hermandad y todas esas cualidades hermosas con las que quisiéramos vivir pero que evidentemente lo que sucede en el planeta es un reflejo de que no estamos pudiendo lograr o de que no hemos podido lograr hasta este momento esa posibilidad.

Ahora les voy a dar una percepción intuitiva que obviamente no es nada más que un punto de vista de todos los posibles puntos de vista con el deseo de simplemente sumar a romper esos esquemas tan arraigados y obsoletos que necesitan ya regenerarse.

Nosotros los humanos tenemos la idea, una idea muy absurda, egocéntrica y arrogante de creer que somos lo más inteligente sobre la tierra porque no entendemos la inteligencia del planeta como tal, como un ser vivo.

Y tampoco entendemos las virtudes de muchos animales o de los árboles como tal o de tantas cosas. Simplemente nosotros hemos etiquetado nuestra inteligencia en función de la comparación con nosotros mismos y de sentir que lo demás es menos importante.

Sin embargo yo creo que evidentemente eso no es real porque siempre he sentido y a lo mejor este es mi caso específico del motivo por el cual yo estoy aquí, es mi caso.

He sentido que los seres humanos más bien somos títeres del misterio, títeres de energías de otras dimensiones, de energías superiores.