Ojalá supieras esto para no opositar mucho tiempo 👉 5 minutos que te ahorran un suspenso

Este fin de semana último subí con mi compañero Paolo y también con mi hermano un pico de 3.000 metros y la verdad que yo pensaba que iba a ser pan comido, porque soy una persona que entrena muchísimo, que hace una media de pasos por encima de 20.000, que sube un montón de hacer rutas con bastante desnivel. Ahora bien, ¿sabéis lo que me ocurrió? En el último tramo, ya cuando acabábamos, en las primeras tres horas que faltaban unos 200 metros, pero había un desnivel espectacular, me empezaron a fallar los gemelos. No era cuestión de cardio, no era cuestión de cuádrices, ni de isquiosurales, ni de glúteo, eso está más que trabajado, eran gemelos. ¿Y qué pasa? Que los gemelos no los entreno prácticamente y casi me lesiono por no haberlos entrenado y porque normalmente no le doy ese estímulo. Y dirás, Diego, ¿y a mí qué me importa? ¿Me da lo mismo? Para, para, porque esto es lo que pasa en las oposiciones. Ojalá hubiera sabido esto en los primeros meses para no suspender la oposición por el eslabón más débil. Al igual que muchas veces nos lesionamos porque tenemos un músculo que no está tan entrenado o abandonamos una carrera porque quizá a nivel de ese estímulo cuando llega la hora número dos no está desarrollado, pues en la oposición pasa lo mismo.

Y vamos a ver los cinco eslabones débiles que tienes que trabajar para que el día del examen, los diferentes exámenes, no falles. Y el primero, ya lo sabes, la habilidad de escribir. Diego, es que se me da mal, me da igual que se te dé mal, si tienen que leer tu tema, cada día tienes que escribir un poquito. Pero no solo eso, no solo la habilidad de escribir. Yo es que los temas me los memorizo al 100%, súper bien, soy súper bueno en memoria semántica. Pero si tú eres débil en inicios y finales, va a ser muy difícil que al inicio logres convencer al tribunal de que quieran seguir leyendo y al final hagas que te recuerden. Así que equilibrio. Lo mismo, es que yo tengo una programación que he llevado al aula y a mis alumnos le encantan. ¿Pero sabes venderla? ¿Sabes comunicar? O aquí tú eslabón más débil es la comunicación. Por muy buena programación que tengas, por muy buenos materiales, si no sabes venderla, si no sabes comunicarla, si no sabes aterrizarla en ejemplos, ¿sabes lo que pasa? Que estás fuera, que te vas a quedar con una nota mediocre.

Lo mismo, vamos a la programación. Tú tienes un grandísimo documento donde no has fallado en ninguna orden, en ninguna ley, no has fallado en ningún decreto. Pero aún así, tu documento es súper aburrido. No hay infografías, no hay una maquetación amable, no te apoyas en el propio documento, en la exposición. Parece que la exposición y la programación es totalmente diferente. ¿Sabes qué? Pues no vas a suspender, pero quizá no vas a destacar como otros opositores que sí que van a tener ese equilibrio de buen documento, documento llevable, amable de leer y además una gran exposición. Lo mismo, yo es que comunico increíble, yo es que puedo convencer a todo el mundo, yo es que hablo de innovación. En un minuto hablo de metodología activa, de evaluación formativa, de Dua 3.0. Pero si tú eslabón débil es que no sabes ejemplificar, no sabes aterrizar, no sabes poner seis ejemplos diferentes de cómo aplicar la evaluación formativa, no sabes aludir de una manera súper aterrizada al Dua 3.0 o no sabes si aplicas el aprendizaje basado en proyectos, los siete pasos y concreta súper bien y te adelantas a lo que suele salir bien y a lo que suele salir mal, también va a ser muy difícil que sorprendas al tribunal.

Lo digo siempre. Los ejemplos es lo que nos diferencia en un mundo donde la información, donde el contenido no es un problema. Y también está el opositor más hippie, entre comillas, el opositor más didáctico, más práctico, que está mucho en el aula, lleva muchos años o lleva mucho tiempo como nuestra compañera Sandra, que antes de ser docente ha sido muchos años monitora de ocio y tenía un montón de dinámicas y juegos. Pero ¿sabéis cuál era su eslabón débil que hasta que no lo cambió no sacó la plaza? La memoria, el estudiar. Si tú, por muy buena que seas a nivel práctico, por muy buena docente que eres, no sabes pasar las pruebas de tema y supuesto, porque no te has aprendido la legislación, no te has aprendido ese apartado teórico, también vas a estar fuera. Una oposición va de equilibrio, va a detectar esos eslabones débiles. Yo cuando empecé a opositar me senté conmigo mismo y dije, a ver, la escritura mal, la verdad mal, el estudio más o menos bien, cuando empezaron a pasar unos meses, la comunicación bien, pero los ejemplos mal, porque no había trabajado nunca.