Operador nuclear: “El apagón revela la fragilidad de una red sin respaldo suficiente”

“Las nucleares no fueron un problema,
fueron una garantía. Lo que pasa es que estaban desconectadas de una
red que había colapsado”, ha afirmado con contundencia Alfredo García,
operador nuclear y divulgador en redes sociales, en su intervención
en 'Herrera en COPE'. A raíz del reciente apagón que afectó a gran
parte de España, García ha desmontado algunas de las afirmaciones
políticas más repetidas en los últimos días.
El experto ha explicado que “las
centrales nucleares cuentan con sistemas de emergencia redundantes,
activados en menos de 13 segundos”, diseñados para seguir
refrigerando los núcleos incluso en caso de pérdida total de
conexión con la red. “Desde Fukushima están cuadruplicados todos
los sistemas de seguridad”, ha señalado.
García ha detallado que el sistema
eléctrico español depende de “una combinación precisa entre
generación renovable e inercia eléctrica”, proporcionada esta
última por centrales como las nucleares, las de gas o las
hidroeléctricas. “Tuvimos más del 70% de producción renovable,
pero muy pocos generadores síncronos en funcionamiento”, explicó.
Y ha añadido que "eso es lo que pone en peligro la estabilidad de la
red”.
Respecto al futuro del mix energético,
ha criticado la dependencia del gas y ha cuestionado el plan del Gobierno de
sustituir a las nucleares con “almacenamiento masivo que aún no
existe ni está en construcción. Hablan de proyectos que tardan 10 o
15 años en hacerse realidad, y aún no han empezado”, alertó.
También ha censurado las razones para
cerrar las centrales nucleares en España, especialmente cuando “el
propio Gobierno prohibió extraer uranio del país” mediante una
enmienda en la Ley de Cambio Climático. “España tiene uranio,
pero se ha prohibido su uso por motivos puramente políticos”,
ha denunciado.
Por último, ha recordado que la “Unión
Europea reconoce la energía nuclear como sostenible”. “Cumple
con todos los parámetros medioambientales, y en algunos incluso
mejora a las renovables”, ha afirmado García, al tiempo que lamentó
la “incoherencia” del Ejecutivo español, que apoya la energía
nuclear en Bruselas pero la rechaza en territorio nacional.
García ha concluído su intervención
reafirmando su compromiso como divulgador: “No me paga ninguna
industria. Esto no es trabajo, es labor”, sentenció.