Papa Francisco | Episodio especial de Voces por una Causa con Julia Navarro

Voces por una causa, el podcast de Entreculturas con Julia Navarro.

Hola, soy Julia Navarro y les doy la bienvenida a un episodio muy especial de Voces por una causa, el podcast semanal de Entreculturas.

Es muy especial porque hoy nos vamos a acercar al Papa Francisco con motivo de su reciente fallecimiento a través de una conversación con Martín Iriberri, Jesuita y director general de Entreculturas y de Albohan.

El Papa Francisco ha sido una figura clave para la Iglesia y para todas aquellas personas que tienen un compromiso con la justicia social y los derechos humanos.

Se puede decir que ha sido el Papa que ha tenido la justicia social y los derechos humanos como el leitmotiv de su papado.

Martín, ¿cómo has vivido...? Bueno, bienvenido y muchas gracias.

Me gustaría saber cómo has vivido la noticia del fallecimiento del Papa Francisco.

Gracias, Julia, buenos días.

Bueno, la verdad que a mí me ha pegado fuerte a nivel personal también.

Ha sido un cristiano tan auténtico, un hombre de Dios, cuando decimos una persona de Dios, alguien que es capaz de formular el Evangelio, o la vida, o la libertad, o la justicia que trae el Evangelio de Jesús de una forma tan clara que te sientes un poco comprometido a responder o a moverte.

La verdad que ha sido una experiencia personal fuerte.

Y luego también a nivel social.

Es verdad que a mí me ha impresionado mucho el impacto social que ha tenido y también el recuerdo que la gente ha tenido de que el Papa ha sido un Papa jesuita.

O sea, mucha gente se ha acercado, ha mandado mensajes, ha generado una conversación, y a nivel social también el impacto que ha tenido.

A mí me ha impresionado mucho pensar que este Papa ha dejado huérfana a la gente de Gaza, a las personas atrapadas en las migrantes y refugiados, atrapadas en las fronteras o en los campos de refugiados, que ha dejado muy huérfana a muchas personas que andaban en los márgenes de la Iglesia y que se han sentido acogidos por él.

También me impresionó mucho sentirme parte de toda esa gente.

Y has escrito un artículo que a mí me impresionó mucho, que ha sido y no se olvidó de los pobres.

¿Esa sería un poco la definición de lo que ha sido Francisco? Yo creo que sí, la verdad.

Bueno, ha sido una alegría muy grande pensar que ha cumplido con un propósito que era muy grande, era muy difícil.

La tarde-noche que lo eligieron Papa, un cardenal amigo de él, Humanés, se acercó y se conoce la anécdota.

Yo creo que el Papa la ha sacado de la anécdota y la ha pasado a una vida con mayúsculas.

Se acercó y le dijo, no te olvides de los pobres.

Y recuerda el Papa que en ese momento pensó en San Francisco de Asís y, de camino a la balconada, eligió para su pontificado ese nombre, Francisco de Asís.

Es que yo creo que, a lo largo de estos años, poco a poco, y muy desde el principio, pero con mucha profundidad y también con mucha cercanía, ha sido capaz de cumplir con ese propósito.

De tantas maneras, en reuniones con los foros sociales, los viajes que ha hecho, los signos, las expresiones que ha tenido para hablar de la Iglesia, una Iglesia samaritana, una Iglesia tienda de campaña, una Iglesia donde cabemos todos, una Iglesia en salida, pero también hablando de la sociedad, esa amistad social que él definió en la Fratelli Tutti, como forma de relación social en torno al bien común.

De tantas maneras, emociona pensar que ha conseguido que su pontificado haya tenido a las personas vulnerables, a los colectivos, a las personas pobres, a las personas heridas o rotas, en el centro de toda su acción pastoral y también de toda su acción de Iglesia.

Además de que el Papa era jesuita, ¿ha sido un Papa muy jesuita? Bueno, yo creo que sí, yo creo que sí.

En los ejercicios espirituales,