LA PARAPSICOLOGÍA EN LOS PAÍSES DEL ESTE (Ramos Perera, "Hora 25", Cadena Ser, 29-10-74)

Un viaje a Rusia.

Ahora ha vuelto.

Quedó entonces emplazado para venir ahora a 25.

Está con nosotros. Miguel Ángel Nieto va a iniciar su conversación con él.

En efecto, el profesor Ramos Pereira ha vuelto de Checoslovaquia, de Polonia, de Alemania del Este y de la URSS.

En la URSS estuvo en Moscú y en Leningrado.

Buenas noches, profesor.

Buenas noches.

Profesor Pereira, empecemos por Praga o por Polonia.

¿Por dónde quiere usted que empecemos? Yo la experiencia más hermosa que he vivido durante todo el viaje ha sido precisamente en Polonia, así que...

Empecemos por Polonia.

Empecemos por Polonia.

En Polonia he tenido, como ya he empezado a anunciar, una experiencia muy sugestiva.

Yo creo que he sido protagonista...

Perdón, antes. ¿Se respeta la parapsicología en los países del Este? Pues yo creo que a esa pregunta podemos responder más adelante, porque...

Pero generalmente, sé que hay unos casos concretos interesantísimos de Rusia, pero, en general, ¿en estos países satélites que he visitado hay respeto hacia la parapsicología? ¿Se cuida, se atiende o no se le da importancia? Yo creo que se atiende toda aquella parte de la parapsicología, primordialmente en la URSS, que tiene una utilidad práctica, quizá con miras tácticas de tipo militar, o hasta incluso pensando en las famosas Olimpiadas.

Lo cierto es que toda esa parte de la parapsicología tiene una atención preferente, mientras que la otra, tengo la impresión, por lo que vamos a ver a continuación, que ha pasado a una especie de vía muerta después de un documento que ha publicado el partido.

Bien, entonces empecemos por Polonia.

En Polonia nos decía usted que ha tenido una experiencia muy interesante.

¿Qué experiencia fue? La experiencia ha sido con una niña de 12 años, una niña que se llama Bojna, que es hija de un conocido director dramático de la televisión polaca, de Stefansky.

Esta niña tiene lo que se denomina en parapsicología visión dermoóptica o paraocular, es decir, que es capaz de ver sin la ayuda necesaria para nosotros de los ojos.

Ver, entrecomillado, porque se trata de otra forma de visión.

¿Es invidente? No, esta niña ve normalmente, es vidente, y para realizar las experiencias con ella, lo que hacemos, lo que hice concretamente, fue ponerle algodones en los ojos, vendarles con un trapo negro, opaco, y tomar toda clase de precauciones.

Como ella necesita de los dedos para poder ver con esta matización de que se trata de una visión diferente a la que nosotros consideramos como normal, entonces también le he puesto una interferencia entre su visión y los dedos, es decir, un cuerpo opaco, para que, aun con los ojos abiertos y sin la ayuda y sin la necesidad de las vendas, tampoco podría ver, que sería totalmente imposible.

Es decir, que en este momento tenía de la experiencia tres obstáculos primordiales, cuatro, diría yo.

Párpados cerrados, primer obstáculo, segundo obstáculo, el algodón, tercer obstáculo, la tela negra, y cuarto, la superficie opaca que estaba entre sus ojos y sus manos.

¿Pero ve con los dedos o emplea el sistema Braille, por ejemplo? Ve realmente con los dedos, con esa matización que hemos hecho al principio, ya que toda esta lectura que realiza la hace a través de un cristal.

Es decir, que en la experiencia que realizamos, yo la recorté cartulinas de diferentes colores con una tijera, formando figuras caprichosamente diseñadas por mí, y después las puse debajo de un cristal.

Y ella, pasando la mano por encima del cristal, era capaz de distinguir las formas, de seguirlas con los dedos, con la yema de los dedos, y hasta incluso de adivinar los colores.

En algún momento, hasta incluso, le recorté figuras ya muy finas, casi de un milímetro de ancho aproximadamente, y ella seguía con toda facilidad la forma, y sin embargo tenía dificultades para poder detectar de un sistema que consistía en establecer la forma.