El párroco de Santoña, Alberto García ha expresado su tristeza por la muerte del papa Francisco 21/04/2025

Comienza la vida por delante en este lunes de Pascua y lo hacemos saludando Alberto García, que es el párroco de la Iglesia Santa María de Puerto de Santoña.

Padre Alberto, muy buenos días.

Buenos días.

Están comenzando a llegar las primeras reacciones de todo el mundo, como lo escuchamos en Radio Nacional de España, la gente va acudiendo a la Plaza de San Pedro para expresar su dolor por la muerte del Papa Francisco. Ya sé, Padre Alberto, que se ha enterado de la muerte del Papa por mí misma, porque ha sido el primero al que he llamado al enterarme de esta noticia, que yo creo que nadie esperaba.

Es verdad que después del alto hospitalaria que recibió hace un mes su estado de salud era delicado, frágil, pero lo hemos visto estos días de Semana Santa y yo creo que la noticia nos ha pillado a todos por sorpresa, Padre Alberto. Sí, porque efectivamente yo también lo vi ayer, le veías que estaba delicado, pero bueno, no esperábamos, porque de hecho yo he visto que es a las ocho que ha hablado comunicado ya después, porque efectivamente tú me lo has dicho. Pero sí, no esperábamos nada.

Bueno, su fragilidad y la edad, ya dijeron cuando estuvo ingresado, que estuvo a punto de fallecer también, pero sí, no lo esperábamos.

Ha seguido de cerca entiendo su enfermedad desde que ingresó por una neumonía hasta ahora. Sí, sí, claro, estamos pendientes y luego, bueno, ves que hombre, él ha tenido mucha fortaleza también y mucho empeño, pero claro, la salud y la edad, y luego una persona como él que desarrolla tanta actividad, pues yo creo que eso también desgasta, o sea, lo podríamos decir así delicadamente, pero es verdad que debería ser un hombre entregado sufriendo hasta el último día.

Ha seguido de cerca su enfermedad, como dice, desde que ingresó por una neumonía hasta ahora. ¿Cómo calificaría al Papa Francisco, Padre Alberto? Hombre, calificar, es complejo. Tuve la ocasión de saludarle ahí, no me acuerdo si estuve en octubre o en roma, y le saludamos con el Señor Obispo, estábamos un momento con él. A mí me parece que es un hombre que, efectivamente, hombre, es un hombre, a mí me parece que es con una visión muy clara del hombre y del trabajo.

Yo creo que su tarea, hay dos cosas que siempre llama la atención, esa fuerza de la evangelización, los hijos del primer día, de enseñarnos a todos que tenemos todos, curas, laicos, la Iglesia, una tarea de dar a conocer a Jesucristo, y luego esa preocupación radical, evangélica, por los que peor lo pasan, todos los descartados que hemos visto, invitar a la gente a salir a la calle, a las periferias, incluso la ecología, el cuidado de la casa común. Creo que hay una serie de cosas que él, de una manera muy clara, ha ido implantando.

Se nota en los viajes, por ejemplo, él ha hecho una serie de viajes muy llamativos y preferentemente donde no se había ido nunca, desde el Papa, hay 40, me parece que son cuarenta y siete, cuarenta y ocho viajes, y ha visitado muchos sitios pobres, pequeños, de comunidades católicas, casi la mínima, que están sufriendo mucho. Nos ha dado muchos ejemplos de cuidado de la persona y especialmente de la que sufre.

La pregunta es, ¿qué va a pasar ahora dentro del Vaticano ante la muerte del Papa Francisco? Bueno, no pasa nada. Lo que pasa es que hemos entrado en ese devacante que se dice falta de cabeza, se paraliza todo, entonces hay dos, que saldrán en la televisión estos días, una figura que es el Cardenal Camarlengo, que de hecho le había renovado en el cargo, que se encarga un poco de que todo esté parado, como el Colegio de Cardenales, pues se encargan de gobernar la Iglesia.

Solo se pueden tomar decisiones muy peculiares y pocas, pero lo que sí ocurre ahora es que se convoca a todos los Cardenales del mundo, porque hay una constitución que establece cómo se elige al sucesor, como dijimos anteriormente. Él lo había, ya Benedicto había dicho algunas cosas, pero era una norma, una constitución, se llama Universi Dominici o algo así, del año 96, ahora se reúnen los Cardenales, primero ahora están por un lado los funerales del Santo Padre, que los había simplificado el mismo Francisco, y luego a la par se van reuniendo Cardenales, hasta se piensa que entre 15-20 días después del fallecimiento puede empezar el conclave, y además los medios de transporte es más fácil que hace muchos años, porque era difícil llegar a los Cardenales.