¡Peligro, Trump ya está aquí! ¿Realidad o Exageración?

Buscamos salir del reflejo que siempre nos devuelve y, a la vez, nos encierra en nuestra
propia mirada harta de verse a sí misma.
Buscamos poner en cuestión los esquemas propios, contrastando, escuchando y debatiendo, con
el que piensa diferente y que, sin embargo, nos acompaña en esta búsqueda.
Escuchar.
Lo hemos roto.
Ya podemos salir.
Ya estamos todos fuera del espejo.
Bienvenidos.
Bueno, arrancamos de nuevo, que hemos tenido un problema técnico, entonces vamos a empezar
a hablar.
Preparaos, que viene Trump.
Aquí estamos los de siempre.
Hace más o menos tres semanas que nos vimos.
C.
Enrique, Eduardo y yo.
Un servidor.
Entonces, Enrique, comentabas.
¿Qué te pasa con Trump?
Bueno, no tanto con Trump como persona, sino con Trump como presidente de Estados Unidos,
con el poder acumulado que tiene y, digamos, desde ese enfoque mucho más agresivo que
la primera vez que fue elegido y con las medidas que ha tomado casi el mismo día 20.
Algunas yo creo que las vimos el mismo día 20.
Y entonces, bueno, pues hay una serie de cosas que ha hecho ya y otras que ha dicho que va
a hacer en breve, que me parece preocupante.
Y sí me gustaría diferenciar lo que son medidas de carácter económico desde un enfoque,
es decir, en este caso claramente liberal o neoliberal o como queráis llamarlo, digo
las medidas económicas, exclusivamente económicas.
Y el otro lo que son las medidas que tienen un calado de tipo moral o social o de enfoque
humano.
Yo no sé, podríamos denominarlo de muchas formas, ¿no?
Y bueno, pues me gustaría hablar de todas esas cosas porque me preocupa el tema, ¿no?
Si queréis entro en cosas concretas.
Sí, sí.
Bueno, espérate, quizás vamos a hacer una ronda introductoria así cada uno y luego
ya entramos a temas concretos que seguro que tenéis por ahí apuntados.
A ver, a mí me pasa un poco al revés que tú, pero sí es verdad que a mí me preocupa
mucho más el tipo de persona que es Trump con todo el poder que tiene, porque claro,
no es igual de peligroso un loco que no tiene poder que un loco que sí lo tiene, y me preocupa
por eso porque la actitud de Trump es una actitud de matón de colegios, es decir, yo
tengo el poder y vais a hacer lo que a mí me da la gana.
Y yo lo que sí disculpo contigo es el tema de la economía, yo creo que no es para nada
liberal el programa de Trump, aunque es verdad que se alimenta del liberalismo y pone ejemplos
como Millet y tal, en el fondo es terriblemente conservador.
Los aranceles y las trabas a la exportación de otros países, eso es una medida antiliberal
casi.
Es muy conservadora y muy nacionalista, y eso es el problema, que si el dueño del mundo,
el país más poderoso del mundo se hace nacionalista y decide que va a machacar a Machacar, en el
sentido de no favorecer el comercio, no apoyar ciertas iniciativas mundiales, lo de la OMS,
me parecen meros detalles, son de cara a la telería, pero me preocupa que la actitud
no sea la de ser un ejemplo para el mundo, sino enseñarle a los demás lo que es un
líder.
Y por ahí, yo sinceramente, aunque me puede caer relativamente mejor o peor, pero creo
que las medidas que está tomando no conducen a nada bueno a largo plazo al mundo, a la
armonía entre países.
Venga, Fede, ¿tú qué opinas de Trump?
Yo opino por una vez, Eduardo, estamos de acuerdo casi en todo, en todo lo que has dicho.
Al contrario de favorecer un liberalismo de mercado, lo que hace el imponer aranceles
es coartar la libertad de mercancías y con el mismo propósito entra en la libertad de
movimiento de personas.
Entonces se aleja muy mucho de lo que ha sido siempre la locomotora del neoliberalismo,
lo que ha sido Norteamérica, y con estos aranceles creo que vamos.