

Description of Placer sin culpa-Alexandra Montells
Alexandra Montells tiene un centro de terapias llamado Masaki Bienestar Integral, ella es terapeuta, osteopata, coach y autora del libro Placer sin culpa: El arte de vivir y amar conscientemente. En sus ratos libres también tatuadora. A través de su proyecto Masaki Bienestar, acompaña a personas en procesos reales de transformación emocional, desde la vulnerabilidad auténtica y el empoderamiento personal entre otros.
This content is generated from the locution of the audio so it may contain errors.
Saludos cordiales. Esto es RadioNuevaEra.es emitiendo un programa más en este espacio Evolucionando en Conexión, en el que intentamos encontrar los conocimientos más interesantes que hay en el panorama nacional e internacional. En esta labor prometeica derrobar el fuego a los dioses y traerlos a todo el que pueda interesarle para su desarrollo personal, para mejorar, para encontrar nuevos horizontes. Soy Antonio Fernández Fígares y espero que pasen un tiempo agradable en nuestra compañía, en un tiempo de radio que va a durar unos 25 minutos y en el que hoy me encuentro con Alexandra Montels, que tiene un centro de terapias llamado Masaki Bienestar Integral.
Ella es terapeuta, osteópata, coach y autora del libro Placer sin Culpa, el arte de vivir y amar conscientemente. En sus ratos libres también es tatuadora, lo que es muy versátil. En sus proyectos, su proyecto Masaki Bienestar acompaña a personas en procesos reales de transformación emocional, desde la vulnerabilidad auténtica y el empoderamiento personal entre otros. Buenas tardes, Alexandra, ¿cómo estás? Buenas tardes, Antonio, aquí con vosotros pues maravillosamente.
Muchas gracias por tu presencia en nuestro programa en Radio Nueva Era y bueno, vamos a hacerte una entrevista porque tienes mucho que aportar. Tienes cosas muy interesantes que pueden ayudar a mucha gente a encontrarse mejor que de lo que se trata en esta vida. Que no sea un valle de lágrimas, sino que sea un lugar de felicidad y de confort.
Vamos a ver, Alexandra, eres osteópata, tatuadora, terapeuta, coach y ahora escritora.
¿Qué tienen en común todas estas facetas tuyas? Bueno, has visto que soy como una navaja suiza, ¿no? A ver, pues yo diría, si te fijas bien, que en el fondo todas mis facetas tienen algo en común, que es conectar. Es conectar con el cuerpo, con el alma.
Diría que cuando hago osteopatía, mis manos no sólo buscan relajar un músculo, quitar un nudo, una contractura, yo creo que buscan más desbloquear historias, esas emociones, porque todo el cuerpo, todo va unido, cuerpo, mente y alma.
Cuando yo tatúo, pues no es sólo hacer un dibujo, al final es sellar en la piel una emoción, porque casi todos los tatuajes, por lo menos los que yo llevo, llevan un gran significado.
Y lo que más me apasiona, que es cuando hago coaching, es acompañar a reconstruir desde el corazón, a dejar huella a esa persona, a que esa persona se encuentre.
Y principalmente ahora, con el libro que he escrito, lo que quiero, aparte de tocar el corazón, es mostrar un punto de vista diferente al que marca la sociedad de ahora, que es un punto de amor que yo creo que se ha perdido, y es recordarnos cómo amar, cómo sanar, e incluso cómo gozar, que no deberían de ser cosas separadas en las relaciones.
Claro, por supuesto, el gozar es muy importante para encontrar más satisfacción en la vida.
Vives en un pueblecito de menos de 400 habitantes y aún así tienes clientes que van desde Madrid.
¿Qué crees que encuentran en ti que no encuentran en otros sitios más grandes? Pues fíjate que a veces lo cuestiono, que se hacen una hora de camino para llegar a mí, y bueno, yo creo que encuentran autenticidad. Yo no vendo humo, yo soy lo que ves, soy una persona cercana, luchadora, que he pasado por mucho, y yo creo que eso se nota.
A mí me gusta, aquí no hay postureo, o sea, a mí me guío mucho por la intuición, me gusta mucho escuchar y encontrar la manera más rápida y sobre todo más acorde del cliente.
Entonces yo creo que eso se nota y que la gente viene no solo porque les ayude a quitar una contractura o a recolocar, sino porque sienten que aquí se puede respirar, que no tienen que fingir, porque no van a ser juzgados, y bueno, pues la verdad que no vamos a decir que mis manos quizás son milagrosas, que voy a empezar a creérmelo ya.
Tal vez tengan una faceta...




















Comments of Placer sin culpa-Alexandra Montells