PoliPepe#1594: Dramas por doquier en la NBA

Esto es PepeDiario.
Polipepe.
Hola, ¿qué tal? Hoy estamos a martes 11 de febrero del año 2025.
Os hablo desde el barrio de Argüelles, en Madrid, en España.
Yo soy Pepe Rodríguez y este es el programa número 1594
de la sección polideportiva de PepeDiario.
Al fin debutó Luka Doncic con Los Ángeles Lakers
y ya nos podemos quitar eso de delante.
Bueno, Albricias, es un descanso,
porque lo que más me interesa de Luka Doncic en Los Lakers
es ver cómo evoluciona su encaje,
que ya os digo yo que va a ser fluido,
que va a haber cero problemas de manera de jugar
y de entendimiento entre las partes,
pero hacia dónde les lleva eso.
¿Hacia qué punto convierte a este equipo o no
en contendiente esta misma temporada al anillo,
incluso ante la ausencia de un pivot de verdaderas garantías
o un pivot del nivel que se necesita para competir en el oeste?
Eso es lo que me interesa.
Y todo lo que hemos vivido la última semana,
el traspaso me parece acojonantemente relevante,
como ha quedado demostrado en este programa
y en Mínimo Veterano también.
Pero a partir de ahí, lo que es el hecho en sí mismo
del debut, de las camisetas,
de la gente pendiente de la primera canasta y tal,
bueno, me da mucha…
No sé, mucha pereza y pasar pa'lante rápidamente este instante
y centrarnos en lo que a mí me parece mucho más relevante,
que es hacia dónde va este equipo y qué va a conseguir o no.
Tiene que ser un día extraordinariamente gozoso
para los fans de los Lakers y para la franquicia de los Lakers,
extraordinariamente doloroso para los fans
y para la franquicia de los Dallas Mavericks
y pa'lante. Una vez que ha pasado esto,
a centrarnos en lo que va a ser definitivo,
que es dónde están los Lakers, dónde están los Mavericks,
dónde están todos los grandes equipos del oeste y de toda la liga
en cuanto a su disposición para pelear por el título
y cómo este equipo, los Ángeles Lakers,
pasan de ser un buen equipo, porque ya eran un buen equipo
que estaba ganando un montón de partidos,
a un contendiente al anillo o no.
Y a ver si Luka Doncic mantiene el nivel
All-Star, candidato a MVP perenne,
All-NBA todos los años
y lo mantiene en los próximos meses o no,
o está renqueante físicamente
o hay ciertas cosas de la plantilla de los Ángeles Lakers
que no le vienen especialmente bien y eso hace
que los miremos con otros ojos.
También su espíritu competitivo, aunque creo que ahí
nadie puede tener ninguna duda
de quién es este hijo de puta balcánico y qué es
lo que quiere demostrar a todos aquellos
que se han pasado la última semana, sobre todo desde Dallas,
dudando de su capacidad física, de su liderazgo, de su actitud,
de sus hábitos alimenticios, de sus hábitos de trabajo,
etcétera, etcétera, etcétera.
Así que a partir de aquí empieza lo más interesante.
Y ya hemos dejado atrás, y en paz vaya,
todo lo que tenía que ver con el debut,
que no pasa, en mi modo de ver,
de ser algo muchísimo más anecdótico
y de cara al folclore
y al divertimento de memes
y asuntos similares.
Pero con muy poquito peso y muy poquito fuste.
Una alegría dejarlo atrás, porque hay cosas muy relevantes
y muy importantes que están pasando en la NBA
relacionadas con los Dallas Mavericks.
Grababa el programa en la tarde del pasado domingo,
por no grabar ayer debido a la Super Bowl,
y en él nos decía que parecía que la lesión era muy poca cosa
y que podría jugar en breve, incluso,
que Anthony Davis quería haber jugado en la madrugada del sábado al domingo
al final del partido, y que Dallas le dijo que no, que no hacía falta.
Eso me hacía indicar que no era un asunto preocupante.
Bien, todo lo contrario.
Como poco, estará de baja un mes.
Cuando no, y ya existen rumores al respecto,
deciden que esa lesión es más seria de lo que parece
y se opera y se pierde el resto de la temporada.
No sé cuánta verosimilitud tienen esos rumores,
pero alguno, he leído ya, sea como fuere,
el problema para los Dallas Mavericks es enorme.
Con un Oeste que se ha reforzado
para que haya hasta 12 equipos aspirando a meterse en playoff,
estando, como están, séptimos, octavos, por ahí, en récord,
la realidad es que los Dallas Mavericks, sin Luka Doncic
y sin Anthony Davis,
son un equipo que uno entiende que le va a costar mucho ganar partidos.
Eso, unido a el jolgorio, la felicidad, la alegría
de ver a Doncic de amarillo en la costa Oeste,
alegría para todos los medios de comunicación
que están alrededor de la liga,
que tienen esa capacidad
para sentirse muchísimo más ilusionados
cuando las grandes franquicias...