PoliPepe#1616: La realidad de los Oklahoma City Thunder

Esto es PepeDiario, PoliPepe.

Hola, ¿qué tal? Hoy estamos a jueves 13 de marzo del año 2025.

Os hablo desde el barrio de Arguelles, en Madrid, en España.

Yo soy Pepe Rodríguez y este es el programa número 1616 de la sección polideportiva de PepeDiario.

Ganaron los Oklahoma City Thunder esta noche a los Boston Celtics.

Y si durante estos días, debido a la racha de los Cleveland Cavaliers, he vuelto a hablar de los Cleveland Cavaliers… Qué cosas curiosas estas, ¿eh? Te pasas toda la temporada regular de la NBA viendo partidos, uno tras otro, equipos, uno tras otro, y casi que te olvidas… Eso es mucho decir, por supuesto, es ridículo, pero casi que te olvidas de los Cleveland Cavaliers y de los Oklahoma City Thunder que llevan desde el principio en cabeza de la clasificación y, además, con enorme distancia sobre cualquier otro equipo que les esté persiguiendo.

Y empiezas a hablar al principio de temporada de ellos.

Por supuesto, qué bien, qué buena temporada, pero llega un momento en el que las narrativas y las historias en las que te fijas son otras.

Por el trade line, por los intercambios, este año por uno tan obvio y gigantesco como el de Luka Doncic, por las lesiones, por los equipos que están cayendo muy por debajo de las expectativas este año con mucha claridad, ¿no? Philadelphia Sixers y Phoenix Suns, por aquellos que, debido a los intercambios que hicieron en el verano, no están a la altura de las circunstancias, van a ser Minnesota Timberwolves, quizás, incluso, equipos como los New York Knicks, que no han alcanzado su tope, jóvenes, equipos como Orlando Magic, que también se han quedado en el camino, otros que lo están haciendo muy bien, Detroit Pistons, Memphis Gleaslies, Houston Rockets, que sé yo, Indiana Pacers ahora.

Este tipo de historias van pasando ante tus ojos, van pasando en la temporada regular, tampoco vas a hablar durante meses continuadamente de los mismos equipos y se quedan un poco al fondo del debate, que no al fondo de la clasificación, que no al fondo de la importancia y que no al fondo, cuando te los encuentras, cuando los ves, cuando decides ponerte el partido de ellos, los Oklahoma City Thunder, los Cleveland Cavaliers, aquellos que van primeros, van quedando un poco ahí al fondo, tampoco tienes nada nuevo que decir de ellos, a fin de cuentas, siguen ganando, siguen jugando bien, siguen pasando por la temporada regular como deben, como tienen que hacer debido a las circunstancias en las que están, a las lecciones que tengan en ese momento, a los rivales, a la fase del calendario en la que se hallen, pero dejan de ser parte del debate, solo son parte del paisaje.

Bueno, de vez en cuando te los cruzas en partidos muy memorables, porque si juegan contra rivales fáciles no los ves, yo al menos, no sé por qué utilizo el plural, yo en singular no los veo, solo los veo cuando juegan contra los buenos porque ya doy por hecho su grandeza, porque les he visto mucho este año.

He visto un montón de partidos de Cleveland Cavaliers y de Oklahoma City Thunder, tampoco es necesario verlos contra Charlotte, contra Washington, contra Portland o contra Utah. Bueno, muy bien, vale.

Sé que van a ganar o si no van a ganar, va a ser una sorpresa que va a ser explicada por algún motivo que nada tiene que ver con la rutina diaria, que nada tiene que ver con cómo son, quiénes son como equipo, y dices, vale, pues otra cosa. Pero, de tanto en cuando, acaban apareciendo en medio de tus días porque están jugando contra buenos rivales.

Y desde luego, cada vez que han jugado contra buenos rivales, no te quiero decir que han jugado contra los Boston Celtics, y que son los máximos candidatos al anillo, a pesar de la temporada regular que hemos visto de estos dos.

Aunque eso, es probable que tuviésemos que revaluarlo o no.

O tampoco tiene ninguna importancia que los consideremos más o menos favoritos. A fin de cuentas, esto no se va a decidir por favoritismo, se va a decidir por quién gane más partidos cuando se enfrenten en Playoff.

Así que da igual que sigamos diciendo que son los favoritos los Celtics.

Pero cuando juegan contra ellos, vaya, si me quedo a verlo.

No es que me quede a verlo, es que casi pongo gafas, pongo un microscopio para ver estos partidos, cosa que tampoco es sana.

Creo que se sacan más conclusiones y se sacan más verdades sin el microscopio, mirando el fluir del juego y sintiéndote prácticamente como alguien que se encuentra por primera vez con estos equipos, tratando de microanalizar cada una de las cosas.

Al menos, ese es mi punto de vista, es como creo que se acerca, o yo al menos, me acerco más a la verdad de lo que estoy viendo, de lo que está ocurriendo. Y resulta que cada vez que me encuentro con los Clibber & Cavaliers, ya lo decía a principio de semana, o la semana pasada, no recuerdo, cada vez que me lo encuentro estos días, digo, guau, estos tíos son buenísimos, pueden ganarlo todo, y no te quiero decir los Thunder.

Y esta noche han jugado con los Celtics.

Y esta noche han hecho un partido que me recordó a aquel primer, Thunder-Celtics, que tenía olvidado en la memoria.

Lo tenía ahí en el fondo y digo, hostia, estos ganaron los Thunder, pero ¿cómo fue? Y empiezo a pensar, ¿no? Empiezo a pensar que fue un mal partido Jalen Brown, un mal partido en la línea de 3 para los Boston Celtics, evidentemente, si los Boston Celtics tienen un mal día desde la línea de 3, es un equipo que queda...