

Description of PoliPepe#1641: Los defectos de los derrotados en la NBA
El primer fin de semana de playoffs de la NBA no nos deja verdades universales pero sí hechos incómodos en no pocos derrotados. Con Javi Rodríguez.
This content is generated from the locution of the audio so it may contain errors.
Esto es PepeDiario, PoliPepe.
Hola, ¿qué tal? Hoy estamos a lunes 21 de abril del año 2025.
Os hablo desde el barrio de Arguelles, en Madrid, en España.
Yo soy Pepe Rodríguez y este es el programa número 1641 de la sección polideportiva de PepeDiario.
Me encanta el lunes posterior, al primer fin de semana de Playoff de la NBA, porque me parece el lunes de sobrereacción emblema del deporte que sigo.
A ver, mi lunes de sobrereacción favorito siempre es el de la NFL, el primer lunes después de la temporada regular.
Se dicen tantas barbaridades, tantas exageraciones por un solo partido, pero también en el resto de competiciones, después de un solo partido, tienes unas ideas de quién ha ganado y quién ha perdido y las quieres extrapolar a todo el año. Evidentemente, eso es una tontería. Pasan mil cosas durante toda una temporada como para que no sean verdad las reflexiones que sacas de un solo encuentro. A veces puedes encontrar ciertas pizquitas de realidad que van a acompañarte durante todo el año, pero las más de las veces, sobre todo, porque nos fijamos en las sorpresas, nos fijamos en aquello que ocurre alejado de nuestra idea a priori, esas no tienen por qué sostenerse.
Sin embargo, si nos vamos a los Playoffs de la NBA, aplica la misma realidad. Estamos hablando de solo un partido, de series largas, de que pueden pasar muchas cosas.
Sí, pero no tantas. Estamos hablando de series, a lo mejor, de siete, no de 82 encuentros por delante, o en el caso de la NFL, 17 partidos, o en el caso de las Ligas, 38 partidos, o en el caso de la Champions League, hay otros siete partidos de la primera fase. Lo que quieras.
Cuando ves la primera carrera de Fórmula 1, primera etapa de una gran vuelta, lo que os dé la gana.
Sacas unas conclusiones que son exageradas siempre, son hiperbólicas, y, a la vez, aún queda mucho para cambiar.
Aquí no, aquí no queda tanto para cambiar.
Y cuando ves, en un fin de semana como este de NBA, y siempre pasa, un par de sorpresas, un par de equipos que han jugado de manera diferente a como esperabas, o de emparejamientos que se han desarrollado de formas, desde el punto de vista táctico, desde el punto de vista de el uso de las armas, no solo de la ejecución, no solo de que estén bien, mal o peor algunos jugadores concretos, sino de cómo veías tú que se cuadraban esos equipos y ahora piensas diferente, dices, bueno, no te calientes, es solo un partido.
Además, también nos pasa mucho, ya no a los analistas, sino a absolutamente todos los seres humanos, ves un partido y piensas que los siguientes van a ser idénticos, porque es lo que te lleva a la lógica.
Si esto ha pasado aquí, ¿por qué no va a pasar en el segundo? ¿Por qué no va a pasar en el tercero? Y bien sabemos que, si no, no habría series a siete partidos, no habría emoción, simplemente acabarían casi todas como empieza el primero, y eso no ocurre.
Eso no ocurre, además, lo hemos visto en esta NBA en concreto, de los últimos cinco o diez años, en innumerables ocasiones, que el primer partido no te dicta como es toda la serie.
Pero no hay red, pero no hay red.
Estás 1-0 en una serie que el que gane cuatro partidos se clasifica, por lo tanto, la importancia es suma.
Así que este lunes de sobrereacción es un equilibrio entre ambas sensaciones.
No querer sacar todas las conclusiones de los resultados, porque eres consciente de que eso va a cambiar, pero tampoco hacer de menos como que solo es el primer partido.
¡Coño, el primer partido! Estamos hablando de que ya estás a tres, de caer eliminado y de irte para tu casa y de que se acabe la temporada.
Así que, por supuestísimo que es muy relevante y por supuestísimo que este lunes de sobrereacción es 50-50.
Mezcla la absoluta trascendencia de una derrota o una victoria con la prudencia de que ahora quedan muchísimas cosas por jugar.
Ha habido varias sorpresas en mi modo de ver.
Tiene que ver con un punto muy subjetivo de tu expectativa, de cómo veías tú a esos equipos, no con la realidad, por poner un ejemplo.
Para mí, la gran sorpresa del fin de semana es la victoria de los Warriors sobre los Rockets y el cómo se produce esa victoria.
Y muchos, la mayoría de vosotros y de vosotras, diréis ¿qué coño sorpresa si yo pensaba que los Warriors iban a ganar esta serie? Como la mayoría de aficionados y de expertos de la NBA creen que van a ganar los Warriors esta serie.
Por lo tanto, no es tanta sorpresa.
Es obvio, pero para mí sí.
Para mí sí porque, supongo que de manera equivocada, me parecía que el emparejamiento era muy favorable a los Houston Rockets.
Si había una duda, también creo que bastante legítima, acerca de los Houston Rockets, eran los puntos, la anotación.
El jugador, esto es muy relevante, como bien sabéis, en la NBA, el jugador que en los momentos en los que nada funciona, coge el balón y ya sea a través de unos contra unos, de aclarados, no tenía ni idea.
Comments of PoliPepe#1641: Los defectos de los derrotados en la NBA