¿Por qué McLaren no tiene nada de culpa en el choque de Norris y Piastri? | A Rebufo GP Canadá F1 2025

Alain Prost, escucha V9.

Esto es V9, tu podcast de Fórmula 1 en español.

Estamos grabando a las 5 menos 5 de la tarde, 16 de junio, hora española.

Nos han contraprogramado un poco, venimos calentitos, vamos a hablar de Fórmula 1, de color naranja, hoy no toca Ferrari, hoy no hablamos de nada rojo, naranja papaya, nada rojo.

Y no es el mejor tema que nos ha tocado, porque claro, venimos un poquito mosqueados y tendríamos que haber buscado algo feliz, que nos sacase una sonrisa, que estuviéramos de acuerdo con gran parte de la gente, pero no es el caso.

Toca hablar de McLaren, toca hablar de órdenes de equipo, toca hablar de si Norris se equivoca, de si Andrea Stella se equivoca o de si la abuela fuma.

Por un lado tenemos las opiniones de gente como Toni Kukereya, ahora lo voy a decir bien, no como en el podcast de esta mañana, que dice que es una barbaridad, que hay que dar órdenes de equipo.

Y luego están los otros que comentan, bueno, y esto creo que tienen razón, como yo soy aficionado, pues sinceramente me la pelan los equipos, yo lo que quiero es más espectáculo, quiero acción en pista, quiero accidentes, quiero problemas, quiero jarana.

Yo creo que hay otra opinión y me parece a mí que va a ser la que vamos a defender hoy, Carlos.

Más allá de si yo soy aficionado, de si yo soy ingeniero, me pongo en la piel de Andrea Stella y por mucho que sea llamativo que haya un accidente, teniendo en cuenta que hay dos pilotos luchando un mundial, me parece que la única decisión no correcta, la única decisión posible, era dejarles correr, era hacer lo que hicieron.

Qué barbaridad estás diciendo, qué desalmados esos de V9.

Lo peor del deporte, vimos ayer, Manuel.

Vimos a un equipo que no fue capaz de parar a sus pilotos, no fue capaz de detener un choque que nunca debería haber sucedido.

Esto es una mancha histórica para el deporte y no podemos permitir eso.

No, se atropelló a una marmota, creo.

Así que bueno, pues de eso va el podcast.

Qué tropelías, qué tropelías hay por ahí.

Venimos cansados. A ver si dura poco esto.

Yo no tengo ni sitio para coger el micrófono.

Este podcast está en decadencia.

Lo analizamos todo.

¡Arrancamos! Aquí sí que es verdad que tengo la ventaja, para grabar el arrebufo, que una ventaja se puede venir en contra, porque si a un mono le das los platillos, pues va a tocar los platillos.

En el podcast de la mañana tengo que estar mirando más estadísticas, más números, es videopodcast.

Ya sabéis que V9 siempre lo mide todo al milímetro y no podemos fallar en ese sentido.

Entonces todos los datos tienen que estar siempre sobre la mesa.

Al milímetro sí que mido, eso te lo digo yo.

Lo de las estadísticas, ¿sabes? El que llegue de nuevas dirá, claro, es que la labor que hacen en este podcast.

¿Cuáles son las estadísticas? 21-19 repetido en bucle, y luego que si 7 mundiales y que si no fueron 6 millones.

Yo qué sé, macho.

Esas son las estadísticas de V9.

¡Qué barbaridad! Las estadísticas consisten en abrirse en Google, normalmente en Wikipedia, la clasificación de la carrera y la clasificación del mundial.

Para acordarse de quién quedó octavo, ¿sabes? O quién quedó décimo tercero.

Y aún así fallamos.

No sé.

¡Qué despiporre! ¡Qué despiporre! ¡Qué lunes! ¡Qué lunes! Lunes, hombre, lunes molón.

Lunes cachondo.

Dos podcasts, no se me está haciendo especialmente pesado el día.

Ya verás, cuando toque grabar este programa dos veces, porque algo se ha grabado mal o lo que sea.

Yo esto no lo grabo dos veces.

No.

O sea, ¿cuántos minutos de grabación tendríamos que llevar? Protocolo a seguir.

Si hoy hubiera un problema y no se pudiera grabar este programa, la solución tendría que ser grabarlo mañana y hacer puntuaciones y rebufo mañana.

Ya está. Punto.

O sea, entonces sí que lo grabarías.

Bueno, sí, pero no hoy.

Ah, vale, vale.

Pero no va a pasar nada.

No podríamos.

Yo mañana me tengo que renovar el DNI, tío.

Cuidado.

Una labor encomiable.

Vente a almorzar.

Lo tengo por la mañana.

No me tires la lengua, pero nunca se sabe.

Cuando hay que trabajar con funcionarios, nunca se sabe.

Yo no voy a bromear sobre la cantidad de horas que voy a tardar en trabajar.