Presentación del Libro "Cirios" por José Gabriel Martín

A continuación les ofrecemos la presentación del libro sirios del reverendo josé gabriel martín rodríguez conciliatorio de la generación de hermandad es y cofradías de la ciudad de granada celebrado el jueves veintiuno de octubre en la iglesia de san pedro y san pablo introduce la presente acción josé manuel gómez enterado vocal de arte ornato de la federación sentado en la mesa de la sala de juntas de la federación el reverendo padre josé gabriel martín rodríguez toma notas mientras los miembros federativa repasa discuten y acuerdan según el orden del día previsto parece absorto antes lo que te rodea casi ausente nota con cuidado la cosa en su agenda repleta de actividad de actos y culto y ha intervenido en el punto inicial de la reunión intervención siempre acertada palabras y tiempos expresión es justa y necesaria porque en nuestro deber es salvación escuchar la palabra de dios y ponernos en su mano que ya lo dijo el mismo cristo que cada vez que nos reunimos en su nombre es el está presente no creo no crean que son tan lo esta tarde aquí ha sido tarea fácil no porque no conozca el camino obviamente sino porque aceptó ruborizamos la presentación de su libro a regañadientes queriendo desde el primer momento quitarle importancia a su texto sirio nace de los silencios paradoja a la hora de hablar con libro los silencio impuesto por la pandemia profirió es un libro que esperanza de momento de mirada de suspiro y también de quebrantos del alma que en esta institución ya tenemos una importante año pero por encima de todo sirios es una candelaria de emociones la candelaria difieren en el tamaño de sugirió pero todo tiene un objetivo como iluminar nadie ilumina más que nadie y todos los cirio se necesita lo uno al otro he aquí la presentación de este libro es preciso y absolutamente necesario para el fraude para el creyente ambos conceptos que necesariamente deben ir de la mano y también para todo aquel que se quiera asomar al balcón de josé gabriel y charla arcos avecina ya la vecina de todos esta presentación podría durar mucho tiempo casi una conferencia para cada reflexión que va desde el veinticuatro de marzo de dos mil veinte hasta la fiesta de la natividad del señor de ese mismo año primero de la pandemia sin embargo me centrará en el período duro en una reclusión mundial que en ese momento convertía nuestra vidas en palabras del autor en un gran fe novio con una clausura impuesta y obligada para beneficio de la salud un relato que comienza siempre con una mirada al día que se cerraba al atardecer y que fueron muchos de ellos ya no de nube y que por tanto nos impidieron ver el sol apenas diez días después del decreto de alarma y en vísperas de la celebración de la encarnación de nuestro señor padre martín rodríguez que vivía la primera línea de este diario interior que fluye como sus cercanos río dar o buscando inundar la conciencia y los corazones de aquellos que tuvimos la suerte de recibirlo cada día josé gabriel que supone que su por su condición durante mucho tiempo de capellán hospitalario ha vivido y convivido con el sufrimiento y el dolor nos manifiesta casi en sus primeras líneas la dificultad humana de conjugar palabras como valor entrega y solidaridad cuando y cito palabras textuales del autor el miedo es el principio rector conjugando esta vez sido realidades que forman parte de su misión sacerdotal lo hospitalaria la cofradía hablando de un mundo que de repente se transformó en un gran hospital para instar a que las hermandad de y cofradía vivieran ese duro momento inicial de desconcierto y miedo con arrojó creativo en la caridad eficaz pidiendo a nuestras corporaciones que fuesen ese otro gran hospital de campaña el paso de los días nos mostraba la dura realidad que se presentaba ante nuestros ojos atónitos y las realidades sociales que pululan a nuestro alrededor y que la epidemia ya convertía en ya convertida en pandemia mundial estaba sacando a relucir vecino que no conocemos ni su nombre ni su historia etcétera y que por modo de aquellos primero aplauso vespertino empezamos