La promesa 684 #audesc

Radiotelevisión Española presenta anteriormente...

Lejos de tu madre y del capitán.

Deja lo que estés haciendo porque quiero que vayas a Luján a hacer unos recados.

Si no le importa, quisiera ir yo. Tengo que encombrar hilo para uno de mis vestidos y así aprovecho el viaje.

No sé cómo lo hace ni a través de quién, pero cada vez que va a Luján a los pocos días aparece por aquí su hermano.

No, pues entonces tenemos que interceptar a Federico antes de que se presente delante de Vera.

Don Manuel podía estar un poco celoso porque si finalmente usted y mi Toño se casan, pues él volverá a estar apartado y se sentirá solico de nuevo.

Es que es tan indigno lo que le han hecho.

¿Mandar fuera a una mujer con un hijo pequeño? No, no. Si está claro que don Cristóbal se la tenía jurada.

Desde que no consiguió echarnos a ninguno de los dos, decidió hacernos la vida imposible.

¡Doña Petra! ¡Doña Petra! ¿Petra se desmayó? ¿Por qué? Por lo único que yo sé es que no podía abrir los ojos.

Esto no puede seguir así. Es muy serio.

¿Dónde vas? Voy a traer al doctor aquí directamente.

Pues sí, ya le dije que le traía uno y me dijo que quería hablar del peluquín.

Poco antes de marcharse de la promesa, Catalina y el varón de Valladar estuvieron en una reunión y al parecer la conversación fue bastante tensa.

Y tú piensas que fue precisamente esa reunión lo que provocó que Catalina se marchara así, ¿no? Claro. Yo creo que ese encuentro puede explicar por qué desapareció sin avisar a nadie.

Su hija me dejó caer y que lo mejor para todo es que ella se marchase con los niños.

Pero entonces estaba ya barajando la opción de irse, Cindy.

Le pedí un tiempo, ella me lo concedió, pero lo que no sabía es que estaba organizando su propia agenda por detrás.

Han estado a punto de quemar al señor Jacobo. Y todo porque andaban discutiendo mientras trabajaban.

Esto no es solo un asunto de ustedes. Quiero que vayan a llamar a sus compañeros.

¡A todos! Quiero hablar con ellos ahora mismo.

Es que no me quedé tranquila con las explicaciones que dio Catalina en su última carta, así que hice unas llamadas.

¿A quién llamaste? A unas cuantas amistades y al propio varón de Valladares. Él me desveló porque se tuvo que marchar Catalina.

Leocadia se tensaba, ahora Alonso la mira preocupado.

Martina, explícate. ¿Qué te dijo el varón? ¿A cuento de qué? Tienes tú que hablar con ese hombre.

Bueno, es cierto que Catalina estaba muy afectada tras todo lo sucedido con él.

No sé, me pareció sensato hablar con él para ver si estaba relacionado de forma directa con la marcha de mi prima.

¿Y qué te dijo? Me reconoció que hizo una última visita a la promesa y que acabaron discutiendo.

Bueno, ¿y qué tiene eso de particular? Catalina y el varón estaban siempre discutiendo.

Sí, pero esa discusión fue más agria de lo normal.

¿Y de qué hablaron esa vez? ¿Si es que te lo contó? Sí, no me lo contó con detalle, pero sí en líneas generales.

Martina, ¿puedes explicarte, por favor? El varón acusó a Catalina de ser el origen del conflicto.

Eso tampoco es ninguna novedad.

No, y además eso tampoco justifica que le impulsara a abandonar su propia casa.

Pero un momento, ¿estamos hablando de la misma persona que arrojó varios carros de estiércol delante de la puerta del palacio del varón de Valladares? ¿No os parece más lógico pensar que no fue más que una de tantas discusiones entre Catalina y el varón? Que, desgraciadamente, no han sido pocas.

En realidad esto no aporta nada nuevo. Catalina ya habló de esas presiones en su carta.

Sí, pero eso es muy genérico. Tío, yo de verdad tengo un pálpito de que en esa discusión, no sé, pasó algo, por lo que Catalina tuvo que marcharse.

Y para no preocuparnos, en la carta simplemente hizo referencia a la presión.

Sí, sí, sí, ahí coincido con Martina.

Pues yo no veo que tenga que tener necesariamente una relación directa.

Espera, espera. ¿Dijo algo el varón sobre si Catalina mencionó su intención de marcharse de la promesa, aunque fuera de pasada? No, no. Ni siquiera sabe dónde puede estar.

¿Y crees que dice la verdad? Pues no, no me parece el hombre más fiable del mundo, pero sí que vi sinceridad en su reacción.

¿Qué quieres decir? Pues que no ocultó su alegría cuando se enteró de que Catalina se había marchado.

Qué mal dicho.

Pero, pero, ¿y lo tienes? Esa es una muestra de que esa discusión no fue el detonante que motivó la marcha de Catalina.

En realidad estamos como al principio.

Sabemos que la presión del varón y del resto de los nobles influyeron, pero eso no quiere decir que provocara directamente su marcha.