Psicología del Bienestar: Claves Para Una Vida Plena | 339

Hola, ¿cómo estás? Muchísimas gracias por estar aquí y por acompañarme una semana más en este podcast. Soy Elena Echeverría, psicóloga y creadora de Psicoguías.com, y te doy la bienvenida a este espacio. Hoy vamos a estar hablando de la psicología del bienestar. Probablemente escuchas mucho la palabra bienestar, ¿verdad? Vivir bien, cuidarse, buscar el equilibrio...

Pero pocas veces nos detenemos a pensar qué significa realmente desde el punto de vista psicológico. ¿Qué es el bienestar? ¿Se puede estudiar, medir, entrenar? ¿Qué hace que una persona se sienta bien? ¿Por qué a veces cuanto más buscamos sentirnos bien, más lejos estamos de lograrlo? De esto se trata esta rama de la psicología, una rama científica que intenta comprender qué hace que una vida sea verdaderamente satisfactoria y significativa, desde la evidencia, desde la investigación y desde esa observación de cómo funcionamos los seres humanos. Recordarte, antes de continuar con el episodio, que este podcast, el podcast de psicoguías, está participando en los premios Evox de la Audiencia 2025 y me gustaría poder contar con tu voto. Es muy sencillo, simplemente pulsas el enlace que tienes en la descripción y comentarios y desde ahí podrás realizar tu voto.

Te toma un segundo y te estaría infinitamente agradecida. Muchísimas gracias de verdad por apoyar mi trabajo. Y decirte también que en esta ocasión Lidl está colaborando con este episodio y quieren que os contemos qué es lo que vale realmente la pena. Y todos sabemos que lo que de verdad importa está en las cosas sencillas. Tenerlo todo sin tener que renunciar a nada, darte un capricho sin sentirte culpable o tener tiempo para ti cada día, porque vivir sintiéndote bien contigo mismo vale la pena.

Descansar, comer una comida sin mirar el reloj, reírte fuerte, abrazar sin prisa, ver a los tuyos aunque sea un ratito, eso también vale la pena. Y claro, también vale la pena disfrutar de una buena comida, de lo fresco, lo sabroso, lo bien hecho, de eso que dices, esto sí merece la pena. En Lidl lo saben, por eso eligen la calidad sin renunciar a la cantidad, cuidan cada producto y a sus proveedores y todo al mejor precio. Porque ayudarte a vivir mejor, a llenar tu mesa sin vaciar tu bolsillo, a poder cocinar para ti despacito pero con buena letra y a disfrutar cada pequeño gran momento es algo por lo que comprar en Lidl.

Lidl vale la pena.

Continuamos ahora con el tema de hoy, la psicología del bienestar. A lo largo de los años la psicología se ha centrado sobre todo en aliviar el sufrimiento, en comprender las causas de la ansiedad, la depresión o el trauma. Y eso fue y es necesario. Pero hace algunas décadas los investigadores empezaron a hacerse preguntas distintas. ¿Y qué pasa cuando una persona no está mal pero tampoco se siente realmente bien? ¿Qué diferencia hay entre no sufrir y vivir con plenitud? De estas preguntas nace la psicología del bienestar, que busca entender no sólo cómo reducir el sufrimiento, sino cómo promover estados de salud mental, satisfacción y crecimiento personal.

Podríamos decir que esta es la parte de la psicología que estudia cómo ayudarnos a florecer, a crecer como personas. El bienestar desde esta mirada no es una emoción pasajera, no se trata de sentirnos obviamente alegres todo el tiempo, ni de tener una vida perfecta, sino de mantener una relación saludable con nosotros mismos, con las demás personas y con nuestra propia existencia.

Y esto incluye tanto los momentos agradables como difíciles. Para entender cómo funciona el bienestar, hay dos grandes tradiciones que la psicología ha heredado de la filosofía clásica, la hedónica y la eudaimónica. El bienestar hedónico se refiere a los aspectos positivos de la vida, el placer, el disfrute, las emociones agradables… Se centra en sentirse bien, en experimentar alegría, satisfacción, placer o gratitud. Son estos momentos donde estamos tranquilos, nos sentimos cómodas en nuestra piel y valoramos lo que nos rodea.

El problema es que estas sensaciones, aunque son necesarias, son cambiantes. No duran de forma constante, no podemos mantenerlas todo el tiempo porque la vida no es estática. Y por otro lado tenemos el bienestar eudaimónico, una palabra que proviene de la filosofía griega y que se centra en vivir bien. No se enfoca en el placer inmediato, sino en el sentido, en el propósito, en la coherencia con nuestros valores y en el desarrollo humano. Este bienestar se apoya en la idea de que la verdadera plenitud surge cuando la vida tiene una dimensión.