Puedes llamarme Espátula, Capítulo I

Estás escuchando historias de trolls androids donde narramos y la decepcionamos relatos de la revista y otras historias boys book presenta puedes llamarme espátula de celia corral vazquez publicado por trolls androids he narrado por elena torró capítulo uno mal cuerpo me lleva desde las ocho de la mañana con la vista fija en tablas de números y nombres cuando algo le da una excusa para apartar los ojos de la pantalla se trata de eso mensajero novato acaba de entrar en la oficina y ahora intenta cerrar la puerta despacito para amortiguar el chirrido de las bisagras las irónicamente eso no hace más que alargar el ruido hasta el infinito y volverlo aún más irritante e ha visto alguna vez al chaval por allí trayendo y llevando encargos como se llamaba le suena algo con equis félix javier auxilio es raro que no lleve encima su acostumbrado macuto con sobres y paquetes lo único que trae consigo es una cajita negra entre las manos y una tremenda cara de llevar a su hámster muerto ahí dentro con pasos trastabilla antes se dirige hacia la puerta de amelia o esto promete espectáculo hoy la jefa ha pedido tres cafés y eso significa que está a la que salta mira de reojo a anton en el escritorio de al lado y ve que también se ha puesto a observar el mensajero equis mas alla luciana ha abandonado todo intento de disimulo se ha dado la vuelta hacia el joven en la silla giratoria y ha plantado los pies encima de la papelera con un paquete de pipas entre las manos el chaval da como seis golpes en la puerta de los cuales son lo llegan a sonar uno y medio la dulce voz de la jefa amelia resuena como en el eco de una caverna que no quiero cápsulas de café espresso hostias que me han regalado una caja de promoción disculpe señora amelia tartamudea el chaval a través de la puerta soy sangre de mensajería sangre eso es eh m ahoga un murmullo de autoafirmación desde un par de escritorios al fondo se oye un o acompañado de un y yo empeñado que era yo el un poco más allá hoy no espero ningún pedido los graznidos de amelia siguen resonando no verá no se trata de un pedido hoy vengo de parte de asuntos internos se trata de un percance un percance m aprieta los labios para reprimir una mueca mira de reojo a luciana que tiene ya una montaña de cáscaras en el regazo y no para de llevarse más pipas a la boca la jefa no responde desde su silla heme casi puede verse reflejada en las gotitas de sudor que caen por la frente de sangre y eso que lo separan más de dos metros al fin la puerta automática de amelia se abre con parsimonia pasa el mensajero se agarra a su ataúd de hámster respira hondo y entra en el despacho tras lo cual la puerta se cierra con un golpe seco m vuelve a mirar hacia la pantalla y haz scroll por los formularios de clientes insatisfechos a tal velocidad que las frases pierden todo sentido su mente sí que posada en las voces del despacho que se filtran a través de las paredes que pasa estoy harta de decir que no me interrumpan a la hora del bocadillo disculpe amelia es que ha habido un percance sí ya un percance eso ya me ha quedado claro es por un cliente sí eso es y no sabe el departamento de asuntos internos que ya existe un formulario en red para que los clientes registren los percances a cuento de que envían ellos un mensajero verás es que si se trata de un asunto extraordinario me parto la crisma cada día y cada noche para sacar adelante esta empresa para que court ori mens funcione como la seda para que cada del intercambio de mentes esté perfectamente sincronizado y supere los controles de calidad pertinentes para que cada puñetero proce queso esté optimizado y automatizado e m ha girado el cuello justo a tiempo para ver a antón vocalizando en silencio aquella seis sílabas con los labios perfectamente sincronizados con el discurso de la jefa abre la última página del cuaderno y añade una rayita más en el recuento semanal y po por algún motivo los de asuntos internos siguen empeñados en saltarse el protocolo bueno es que a ver de qué caso extraordinario se trata que le picase cliente será lo típico no uno de los cuerpos receptores estaba borracho sin previo aviso distribución uno de los dos se niega a intercambiar la mente de alta el físico no cuadraba con la foto faltaba no sobraban dedos no verá es que ha habido una transferencia de cuerpos incompleta e m frunce el ceño como quien