
Rafa Gorrotxategi, maestro chocolatero, entrevistado por dos niños

Description of Rafa Gorrotxategi, maestro chocolatero, entrevistado por dos niños
Adriana Zamorano y Mateo Marquiegui entrevistan, cara a cara, a Rafa Gorrotxategi. Han preparado las preguntas y la entrevista a conciencia durante días y ahora ha llegado el momento de la verdad. Rafa se abre a esta pareja maravillosa.
This content is generated from the locution of the audio so it may contain errors.
Ha llegado uno de los grandes momentos del programa,
porque en la radio lo que se hace, además de informar y entretener,
es conocer a mucha gente, al mundo de los celebrities, por ejemplo,
que también suelen acercarse a las emisoras de radio.
No sé por qué no te me oyes. ¿O tú has hecho algo?
Ahí, ahí. Imagínate, Martín, la magia de la radio.
Como no nos están viendo, no saben lo que puede ocurrir aquí.
¿No te viene un olor a chocolate?
Bueno, ese olor a cacao maravilloso
es porque contamos ahora mismo…
Podríamos estar aquí o en el Museo del Chocolate.
Claro, tranquilamente, y la gente se lo puede creer.
Estamos con Rafa Gorochategui. Un aplauso para Rafa Gorochategui.
Señor Rafa, ¿cómo estás?
Muy bien, encantado de estar aquí con vosotros.
Primero, gracias por venir y por atreverte
a enfrentarte cara a cara con dos comunicadores
tan directos como son Adriana Zamorano y Mateo Marquegui,
a los que también les damos un gran aplauso, claro.
Ellos se van a currar una entrevista cara a cara.
Una cosa es decirles que pasen unas preguntas
y yo te respondo por escrito.
Y otra cosa es mírame a la cara y dame esas preguntas.
Ellos tienen total libertad, así les dijimos, Rafa,
para preguntar. Pueden ir a por ti, en un momento dado.
Y miedo me da. Y miedo te da. Yo no sé.
Bueno, chicos ¿qué tal? ¿Estáis nerviosos?
¿Habéis preparado muchas preguntas?
Eh… Sí, sí, como 18.
¿Eh? Bueno, igual no todas vamos a poder poner,
pero vamos a por ellas, rapidito. Venga, ¿quién empieza?
Yo. Venga.
¿Elegiste ser tu repostero o te viste un poco obligada
a seguir con la tradición familiar?
Buena pregunta, eh. Buena pregunta, sí.
Estos son buenos, eh. Bueno, a mí me ha gustado la fotografía.
Yo iba para hacer fotografía, hice cosas así, trabajé…
Pero me tocó la Mili. Antes hacíamos la Mili.
A los 18, 19 años, terminé la Mili y me encontré parado
y empezaron a hacer, entonces, entre cinco pasteleros de Ipuzkoa,
un obrador para hacer helado.
Entonces, empecé a hacer helado porque yo, aparte de la fotografía,
me gustaba el arte, hice un dibujo voluntario,
me veía un poquito como artista.
Entonces, en principio no quería la pastelería,
empecé a hacer helado, estuve tres años en Tolosa haciendo helados
y luego me pareció un poquito rutina, todos los días,
seis o ocho clases de helado.
Y en casa, pues ya a mi padre le veía mayor
y mi padre me dijo, ven para casa que aquí hay mucho trabajo
y así fui a casa.
No fui obligado, fui contento también,
pero no estaba en mis perspectivas años antes
el de ser chocolatero pastelero.
Pues menos mal, ¿no?
¡Venga, más preguntas, rápido!
Si no hubieras sido repostero, ¿qué profesión habrías elegido?
Pues la fotografía me gustaba mucho.
Fotografía, vídeo, cámaras…
Ahora haces fotos tú a tus productos.
Sí, también.
Y un poquito yo el diseño de la época de mi padre,
se presentaban los pastelos o las tejas de una forma,
pues cambié todos los estoches, los diseños,
cajas más modernas y todo eso, pues sí, metí mucha mano ahí.
¿Cuánta gente trabaja en la fábrica contigo?
Bueno, no me gusta llamarle fábrica porque somos un poquito pequeños,
le llamamos obrador de pastelería y en el obrador estamos fijos 17
y en Navidad, pues cogemos siempre 5 extras más, más o menos.
En Navidad 22 y el resto del año 17.
¿Cuál ha sido tu creación más innovadora
y de la que más orgullosa te sientas?
Bueno, pues vas cambiando de lo que te diseñó el padre
y de lo que se hacía antes, hemos cambiado totalmente las tejas,
antes se gustaban las tejas que fueran gordas, eran curvadas
y ahora la gente todo quiere más fino, más sabón, más sutil,
entonces he creado yo unas tejas finas, planas
y cuando veo a la gente que les encanta lo que les gusta,
pues bueno, estoy muy satisfecho con las tejas.
Hemos visto que haces chocolate, pero también haces muchos postres,
¿cuál es tu creación más popular?
Bueno, te he dicho, las tejas...
Hay varias, los turrones.
Sí, lo que más hacemos, pues son el resto, casi todo el año,
las tejas, los borrochas, chocolates, hacemos muchas tabletas de chocolate,
bombones, eso lo hacemos todo el año y en Navidad, pues muchos turrones
y roscos, sobre todo, roscos cada año vendemos más,
son los roscos distintos, porque en todas las casas se come el rosco
el día de Navidad, hay muchas pastelerías que les gusta hacer el rosco sin hacer,
a otros les gusta que sea como un bollo muy tiernito
y el nuestro es distinto, es un...
Bueno, en el rosco aquí está la pregunta del millón,
¿nata o crema? Aquí no hay más historia.
No, no, no, la respuesta es así, nata.
¿Quién le gusta la nata?
¿Y la crema?
¿Ves? Esta gente sabe, esta gente de futuro sabe.
Lo que hacemos es mucho mixto, yo soy también más de nata
y sobre todo una cosa muy importante, el rosco solo ponemos el aba,
no ponemos muñequitos ni nada.
Como la tradición manda.