La Coordinadora Estatal confirma un notable crecimiento del número de personas que ya consumen productos de Comercio Justo. Personas que con esta actitud se rebelan contra condiciones abusivas de trabajo, explotación infantil o degradación medio ambiental.
Productos como el café, el cacao, el azúcar, el té o ropa generan ingresos millonarios para unas pocas empresas y esconden unas condiciones laborales y sociales pésimas. Tienen en común que su producción se desarrolla principalmente en países de América Latina, Asia o África. Y de este modo, la desigualdad en el reparto de los beneficios a lo largo de toda la cadena de producción es otra de las importantes características que comparten.
Desde la Coordinadora Estatal, recuerdan que los artículos de Comercio Justo garantizan los derechos laborales y humanos y respetan el medioambiente. Forman parte de su ADN y de cada una de sus etiquetas. El café, el cacao, el azúcar, el té o la ropa son los productos más significativos de este modelo comercial que nació en los años 60 y hoy está presente en más de 70 países.
Escucha el podcast en el que conversamos con Marta Guijarro, portavoz de la Coordinadora Estatal del Comercio Justo en España.
Comments