El reconocimiento y deseo de un anciano pastor, para un fiel hermano

El Espíritu Santo me condujo a una Escritura que es bien conocida por tantos de nosotros y con la ayuda del Señor yo quiero dar un enfoque distinto a lo que hemos escuchado al respecto, no dudando de que será de instrucción y de inspiración para nuestra vida.

El tema se titula, El reconocimiento y deseo de un anciano pastor para un fiel hermano.

¿Qué le parece? El reconocimiento y deseo de un anciano pastor para un fiel hermano.

Y la Escritura se lee en la Tercera Carta de Juan, capítulo 1, versículo 1 al 4, dice así la Palabra de Dios.

El anciano hagallo el amado a quien amo en la verdad, amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma.

Pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad.

No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad.

Dice que Juan anda ya por los 100 años, por eso el anciano, el pastor anciano anda por los 100 años y él fue incansable en el trabajo para Dios, fue incansable de una manera extraordinaria, quizá hizo menos iglesias o constituyó menos iglesias que Pablo, pero fue un hombre de confianza que vivió con Jesús, él disfrutó los mejores días de Jesús, fue uno de los tres que anduvo con él.

Y la vivencia y la experiencia de Juan, escuchando las enseñanzas de Jesús, enseñanzas diferentes, ya fuera de primera mano o envuelto en una multitud, y él pudo llegar a asimilar de una manera extraordinaria quién era Jesús y qué anhelaba Jesús para sus hijos.

Él pudo mostrar esos momentos para trasladarlos a los oyentes de Jesús, de esos mensajes que consolaban, de esos mensajes que traían salud, sanidad, resurrección.

Era algo maravilloso lo que él pudo vivir de primera mano al lado del Señor Jesús.

Cuando Jesús se fue, el ministerio continuó. No se oye mucho. Sí, Pedro y Juan subieron al templo y se acuerda que sanaron al cojo de nacimiento, pero en un momento ya no se ve Juan muy cerca, pero él anduvo haciendo cumplidamente el trabajo que el Señor le había dejado y estableció, estableció iglesias.

Y aquí en esta carta, en breve yo le voy a enumerar lo que él sintió en su corazón hacia este primer nombre, Gallo. Es un buen nombre para un hijo, ¿verdad? Gallo, así se llamaba, Gallo, al hermano Gallo o al anciano Gallo.

Pero antes de llevarles a un relato de esta parte, deseo presentarles un pequeño repaso del mensaje del domingo pasado, bajo la tesis de Jehová es la tierra y su plenitud el mundo y los que en él habita. Con estas palabras que vienen del cielo para