Relato 42. Una charla diferente

Bueno hola qué tal sean bienvenidos a una nueva emisión de estos relatos de el blog del divino que ya llevaba rato que no nos hacía por diferentes cuestiones sobre todo de que me he estado dedicando a otras cuestiones pero bueno vamos a tratar de rescatar esta sección compartiéndoles precisamente un relato sacado de la página de creepypastas puntocom que espero sea mucho desagrado y comenzamos que el título de este relato es una charla diferente una historia que es narrada luego de cinco horas de haber iniciado el ritual de exorcismo diez prácticamente media noche casi voy entrar de vuelta a la habitación y aún así me sigo preguntando si lo que haré será lo correcto siempre nos han dicho que no debemos hablar con ellos ni mucho menos creer en sus palabras pero yo quiero hacerlo tengo curiosidad de saber que tiene para decirme que puede desvelarme sigo escuchando esos aterradores gritos desde el otro lado de la puerta pero en vez de temor ciento uno gran ansiedad un desespero por entrar y confrontarlo lo único que me detiene es esta conversación mental que estais teniendo conmigo mismo pero bueno ya es hora el sacerdote se puso de pie y dio un largo respiro mientras miraba su biblia y de forma lenta pero decidida avanzó hacia la puerta que le daba entrada a aquella siniestra y fría habitación el hombre escaló de la manija de la puerta e ingresó he vuelto demonio un abrupto giro de cabeza y un aliento tibio y fétido antecedieron una voz muy ronca bienvenido padre el sacerdote guardó silencio por qué esa cara acaso andas buscando respuestas quiero saberlo todo a qué te referías cuando decías que algo extraño estaba pasando en el infierno soltó una risa burlona primero debes soltarme no te da lástima con esta pobre niña de siete años sus muñecas están sangrando por haber apretado tan fuerte los nudos y está sobre un charco de su propio vómito el sacerdote lo miró sin responder libérame y podremos negociar libérame este cuerpo no vale nada para mí hará que la pequeña se muerda la lengua hasta destruir cela y además de verla ahogándose con su propia sangre no podrá saber nunca nada de lo que tengo para decir libérame después de una breve duda el sacerdote accedió y liberó todas las ataduras del cuerpo de la niña poseída al hacerlo esta cruzó las piernas y posicionó su cuerpo de frente al sacerdote su mirada se clavó en los ojos del clérigo y dibujando una mac cabra sonrisa preguntó qué tareas dispuesta a sacrificar por el conocimiento y la información que estoy a punto de darte es que acaso ya no te libere estoy poniendo en riesgo mi propia seguridad no es sacrificio suficiente no te preocupes no está entre mis intereses provocarte daño físico pero la niña hizo una mueca como si estuviese pensando mientras miraba al sacerdote columna fría seriedad a continuación soltó una risa chillona y estruendosa que sucede no puede entender con más con nombre dedicada a dios y a su iglesia puede ten tener un hijo pero por lo que veo no estás muy orgulloso de él lo rechazaste tanto a él como a su madre tal parece que son un estorbo para toda ocasión cómo cómo sabes tú todo eso o un sacerdote con un hijo secreto esto sí es gracioso silencio demonio no me provoques dame su vida y tendrás lo que deseas el sacerdote quedó contrariado y en silencio ese niño nunca lo has querido podré poseerlo y quedarme con su alma en el proceso morirá pero no creo que te afecta mucho cerramos el trato te diré lo que deseas un largo silencio invadió la habitación