SANAR con RESONANCIA: El Uso del OSCILADOR de ONDAS en la Medicina FRECUENCIAL | Ep. 26

Es una de las tecnologías más fascinantes que conozco, y es que fue creado precisamente por un científico adelantado a su tiempo. Actúa a nivel físico, energético y celular.

Lo que te proporciona el oscilador es un espacio vibracional para que tu organismo recupere el equilibrio natural y se restaure. El cuerpo tiene una sabiduría profunda, una sabiduría propia. El campo unificado es el que le ha dado esa sabiduría. Solo necesita entrar en coherencia para volver a recordar quién es. Es como si el cuerpo, al recibir la armonía de frecuencias, recordara su melodía original, y cuando recuerda eso, recuerda cómo sanar.

He visto personas llorar de alivio, otras que se quedaban en un silencio profundo porque no sabían cómo expresarlo, y por fin podían volver a habitar su cuerpo desde la libertad.

Si se implementara más en la medicina tradicional avanzaríamos mucho más rápido, porque le devuelve al cuerpo su propio lenguaje.

Bienvenidas y bienvenidos a un nuevo episodio de Salud en Frecuencia. Hoy vamos a hablar del oscilador de ondas. Estoy enamorada de esa tecnología, y espero que tú también te enamores. Porque cuando descubras lo que hace un oscilador de ondas, te va a parecer magia, pero no lo es. Es pura ciencia, pura resonancia para ayudarte a volver a tu equilibrio.

George Rakowski fue el inventor de esta maravillosa tecnología. Era un visionario que hoy te voy a presentar. Ponte cómoda, ponte cómodo, coge si quieres un poquito de notas, porque el temario de hoy es digno para que de verdad te tomes notas y entiendas cómo funciona tu biología. Y empezamos.

Laura, hace unas semanas estuvimos hablando del campo unificado, del campo de punto cero.

Hoy vamos a seguir en esta línea para seguir hablando de física cuántica, porque creo que además consigues trasladarlo de una manera muy sencilla. Y es que lo hemos dicho muchas veces, todo en el cuerpo vibra, emite y responde a frecuencias. Entonces, detrás de esta afirmación, me gustaría hacer un poco de recapitulación. ¿Cuál es realmente la base científica de esta afirmación? Bueno, pues en primer lugar quiero decir que sí, que estoy muy contenta, porque si hay comentarios que recibo bastantes veces es que, aunque hablemos de cuántica, pues lo entienden.

Entonces esto es algo que me pone muy contenta, porque realmente esa es nuestra misión, acercar al espectador una nueva manera de comprender su realidad. Y la cuántica aplicada nos da muchas pistas para comprender que somos seres profundamente bioenergéticos y que realmente nuestra realidad es distinta a la que siempre habíamos intuido.

Entonces, me gusta que empecemos hoy por poder explicar y comprender qué es esto de la vibración.

Porque cuando decimos que todo en el cuerpo vibra y emite y responde a frecuencias no es algo metafórico, estamos hablando de una realidad profundamente científica. Esta afirmación nace del corazón mismo de la física moderna, especialmente de la mecánica cuántica y de la biofísica. Mirad, desde el siglo XX sabemos que la materia no es sólida, que no es estática.

Si miramos profundamente dentro de un átomo encontraremos partículas subatómicas como los electrones, los protones, los neutrones, que no están quietos, sino que oscilan, giran y se comportan como ondas. La verdad es que tienen un comportamiento que está muy lejos de lo que contemplamos como natural, como arriba-abajo, como desplazarse derecha-izquierda, estar aquí o allí. Realmente veremos que la cuántica es un misterio que nos acerca a un mundo completamente diferente. Es un nuevo paradigma de cómo comprendemos la realidad.

Lo que sí que hacen estas partículas es vibrar. Ellas vibran. Y si ellas vibran, la materia vibra. Entonces esto también nos incluye a nosotros, a nuestro cuerpo, a nuestras células, a nuestro ADN, a nuestros órganos. Todos nuestros órganos, células, en realidad todo nuestro cuerpo emite campos electromagnéticos medibles gracias a esta vibración. La biofísica cuántica, que es la especialidad en la que yo he profundizado, ha demostrado que estas frecuencias no solo están ahí, son esenciales para que las funciones biológicas se regulen y se den correctamente. Por ejemplo, el corazón género,