EL SECRETO DE GABO: Encuentro en la Tercera Fase

Todo el mundo sabe que Gabriel García Márquez es uno de los grandes genios de la literatura colombiana. Mi escritor favorito, todos los que me conocéis lo sabéis, es mi escritor favorito y probablemente el culpable de que yo esté viviendo en Colombia ahora mismo.

Y lo que poca gente sabe es que vivió un encuentro en la tercera fase. Y aquí es donde entra en juego este hombre que tengo aquí ahora mismo conmigo, que es Diego Reyes, periodista de RECN Radio, donde además tiene su programa Nocturna, aparte de su canal de YouTube, Pandemia Misterios, que un buen día conoció a JJ Benítez, quien le hizo una confesión a raíz de otra confesión que le hizo Fabio Zerpa, y se quedó así como pensando, ¿será que a JJ Benítez está en lo cierto? ¿Será que a Gabo lo abdujo una nave extraterrestre? ¿Lo abdujeron? Y a partir de entonces es que empezó su meteórica carrera literaria y se encontró con muchas cosas.

No solamente con esto que estamos hablando, sino con todo el entorno sobrenatural de Gabriel García Márquez, que como nos va a desvelar ahora mismo, pues tenemos muchos motivos para pensar que ese realismo mágico, casi de género fantástico que impregnaba sus obras, estaba más inspirado en la realidad de lo que pensamos. Muy bienvenido, mi queridísimo Diego, bienvenido. Muchas gracias, Mado. Pues el placer es mío, el honor de estar aquí contigo.

Hemos estado en otras oportunidades yo de entrevistador y tú de invitada. Ahora cambiamos de roles y te agradezco mucho esta invitación y quiero antes que de empezar agradecerte porque tú hiciste una labor cuando yo estaba muy confundido de cómo iba a ser mi tarea editorial. Tú me tendiste una mano, me diste un consejo y gracias a ti pues en parte está este libro que tienes ahí muy bonito y te agradezco.

Lo estamos proyectando en pantalla y que la gente sepa que este libro está en la editorial Cangrejo Editores, que es donde tú has vertido toda esta información porque tú me llamaste un día y estabas investigando este tema, que esto es brutal, que la gente de verdad se va a flipar. O sea, los amantes de Gabo vamos a flipar, pero los amantes del mundo del misterio en general también.

Y claro, es que tú te encontraste aquí con algo revolucionario dentro de lo que es el universo Gabo y de repente dijiste ¿y ahora qué hago con esto? Pues publicarlo, obviamente. ¿Cómo lo transmitimos? ¿Cómo lo divulgamos? Y aquí está esta magnífica obra, me encanta además la edición, de El secreto de Gabo, de Gabriel García Márquez, que lo presentaste el otro día, muy bien acompañado por JJ Benítez en la Feria del Libro de Bogotá.

Precisamente porque, ¿esto cuándo empieza, Diego? Bueno, estamos hablando, nos tenemos que remontar a casi seis años, cuando como tú bien dijiste yo conversé con JJ Benítez, una entrevista de un periodista a un escritor exitoso, y en ese momento yo recuerdo que estábamos haciendo así una videollamada y él estaba en su estudio, en su estudio personal, y allí en uno de los apartes de su estudio había un libro de Gabo, creo que era Cien años de soledad, y yo le pregunté, evidentemente que sí me gustaba Gabo, y me dijo que era uno de sus escritores favoritos, que siempre durante toda su vida ha tenido un libro de Gabo que lo ha acompañado. Y terminamos hablando del Gabo y me dijo, a propósito del Gabo, yo estoy seguro que algo le tuvo que haber sucedido, porque la historia de Gabo es muy particular, es mágica también, si se quiere.

Entonces él me dijo, investiga algo que le pudo haber sucedido, no me lo soltó de una, no me dijo la información que él tenía, sino me dijo que algo en su adolescencia, y en Cartagena, me mencionó a Cartagena. Entonces empezó la tarea, empecé a leer cuánto libro había de la infancia de Gabo, la verdad yo naufragué, en un momento dije, la investigación no va para ningún lado porque yo no encuentro nada.

Por ahí encontré a una persona que se llama Manuel Clemente Zavala, una persona muy extraña, que fue el jefe de redacción del diario El Universal cuando Gabo trabajaba, muy joven, trabajaba en Cartagena. Entonces esa persona, imagínate, no era una persona adopta en el sentido de que no fue a la universidad, tal vez fue estudió primaria, pero hablaba 6 idiomas, era muy erudito, sabía de arte, sabía de arte.