Senderos Jacobeos. Las Sendas de la Vida: "Compartir, respetar.....Amar". Fray Paco Castro

La senda de la vida historias del camino de santiago senderos saco deseos la senda de la vida historias del camino de santiago compartir respetar amar palabras del poeta antonio machado dicho esto el que organiza el por qué del viaje la estrella en la flor en el pelaje deja su alma aprendida lo evidente no siempre es lo esencial lo esencial es fundamentalmente espiritual el amor es genuina mente espiritual y motor de transformación del mundo era un cuatro de octubre festividad de san francisco de asís el otoño iba a cubriendo con su manto de regeneración el medio ambiente suele ser la época otoñal de disminución del número de peregrinos y por tanto una oportunidad mayor de encuentro con la soledad fructífera la del ser humano que se queda a solas consigo mismo para redescubrir la sinfonía de la vida todos esos mensajes aparentemente ocultos que condenamos al ostras sismo en nuestra vida cotidiana una bella oportunidad para redescubrir la vida en todas sus manifestaciones me avisaron de que en la iglesia convento cual había una peregrina que preguntaba por mí que quería hablar conmigo se trataba de una mujer que acaba de concluir su peregrinación y compartido conmigo alguna de sus experiencias en tierras navarras había coincidido con dos peregrinos de allen de los balcanes regresaban a sus casas a pie de san dando la ruta jack codea después de haberla coronado en compostela uno de ellos le mostró una piedra cita con una flecha amarilla que le dijo representaba su propia vida y que ahora después de la peregrinación entendía que tenía entre sus manos que debía dejarse guiar siempre la flecha que indica el camino del bien de la bondad de lo justo de lo bello del amor tal fue el impacto que causó en la peregrina este espontáneo testimonio que quiso saber en donde había conseguido la piedra marcada con el signo jaco veo porque ella sentía esa misma necesidad de encontrar un símbolo un estímulo para seguir adelante en la peregrinación de la vida me contó también que había realizado la peregrinación con su marido de origen nipón turista de creerlo y filosofía y que había sido una oportunidad preciosa para poder profundizar en su vida marital compartida ya desde hacía muchos años fruto de la cual habían nacido tres hijos que aun siendo nativos del país del sol naciente recibieron de su madre un plus de educación intercultural interreligiosa basada en el respeto y en el sentido profundamente espiritual de la vida de modo que celebraciones religiosas cristianas y budistas se compartían por igual en el hogar familiar su marido