SOL ESPÍAS - EL ENTORNO DEL MONGE 14-10-25

Once y un minuto de la mañana de este martes, que se camufla de lunes, pero que es martes, ya lo saben. Por cierto, climatológicamente hablando, pues un poco triste y eso que nos las dábamos de que iba a hacer sol, iba a haber una temperatura agradable, bueno, pues de momento no. No sabemos si a lo mejor con el paso del día y del tiempo, pues la cosa cambia, pero de momento es un día climatológicamente triste de panza de burra y a ver si despeja un poquito que a lo mejor sí. Ya veremos a ver. Bueno, segunda hora ya del entorno del monje y nos vamos a las arenas, a las arenas, a las arenas. Está con nosotros Sol Espía.

Buenos días. ¿Qué tal? ¿Cómo estamos? Muy bien. Bueno, pues Sol Espía, como saben ustedes perfectamente, es la tótum de Enredacer en la arena y estos días pasados, no sé exactamente la fecha, pero lo va a decir ella, ha habido una iniciativa importantísima en Terrastur porque allí llevaron a cabo un acto, llevó a cabo un acto Sol Espía y su asociación Enredacer en la arena importante.

Sí. ¿Qué pasó allí? El 8 de octubre, el pasado miércoles. Bueno, pues hicimos un proyecto que tenía los objetivos, iban enfocados a dos aspectos, a tres. Uno y dos prácticamente se dan la mano. Conocer, dar visibilidad al pueblo saharaui y por otra parte ser capaces de transmitir cuál es el sufrimiento y la situación por la que están pasando. Y en segundo término, pues bueno, hacer una recaudación que lógicamente todo proyecto necesita una financiación. Entonces, estos fueron los dos aspectos que digamos que nos movieron a hacer un evento que fue un macroevento.

A mí me sirvió de lección y de enseñanza porque realmente es muy fuerte hacer todo un día. Hay una frase tuya que has dicho que yo no me creo, una y no más, pero no me lo creo. No, no, habrá muchos, pero no tan intensos, no tan potentes. Ya hay programadas muchas cosas, claro que sí, ya se visualizan. Otras conmemoraciones y otras reuniones y charlas. Pero una cosa es hacer a lo mejor una reunión o que vaya acompañada de una comida, de unas pichas, con una charla o un mercadillo.

Eso es lo que más me va a costar hacer de nuevo, pero eso está bien. Y otra cosa es hacer un macroevento que empieza a las 10 de la mañana un poco antes y acabamos a las 10 de la noche y yo de recoger a la una de la madrugada. O sea, eso es demasiado, ¿no? Eso es lo que no hay más. Yo creo que no, no porque sea agotador. Que también. También es, también lo es, sí. Pero creo que es mejor dosificar. Lo que pasa es que cuando se hizo la planificación, era todo en Tierras Tour, que bueno, ellos se volcaron el local y todo lo que se les encargó, pues lo hicieron a las mil maravillas.

La gente que asistió estaba encantada de la cata, de cómo lo prepararon todo, del mismo desayuno que se esperaba. Bueno, vamos, era así. No, no, era todo, digamos, que excelencia, ¿no? En ese aspecto. Y luego, en cuanto a la parte nuestra, lo que fue las charlas, yo creo que sí que se pudo llegar un poco a tocar el corazón de los que estaban allí. Y una vez más, pues, me quedé sorprendida al ver que es un tema desconocido, ¿no? Totalmente desconocido.

Dicen, es que nos has aportado algo que nunca nos sabíamos. Es que, realmente, es que la gente se ha olvidado de que eran españoles, de que fueron la 53 provincia de España y de tantas y tantas cosas y que ahora son apátridas. Es acostarte un día teniéndolo todo y levantarte una mañana que no tienes nada.

Esa realidad. Bueno, antes de entrar otra vez en esa realidad, que quiero abundar contigo en ella, cuéntame la actividad. ¿Ha habido un muro? ¿Ha habido mercadillo? ¿Ha habido conferencias? Sí, ha habido un poco de todo. Se empezó con un desayuno, así además muy coloquial, muy bien, porque, bueno, yo pensé que seríamos diez personas, siete, porque a esas horas de la mañana hay gran parte de trabajo.