Sònia Guillén - El principio de incertidumbre

La joven que arroja con el pincel un reguero de ocre contra el cuadro se llama Sarah Ponce, lo hace con los ojos cerrados y al abrirlos observa las gotas que se deslizan con cuidado por la tela para unirse con otras.

El frío se le cuela por el cuello de la parca y le entumece los dedos manchados de pintura, así que deja el pincel para meterse las manos en los bolsillos.

El punto de partida de un libro que les vamos a recomendar a continuación porque saben cuánto nos gusta la literatura, cuánto nos gusta hablar de libros y sortearlos entre los oyentes.

Sonia Guillén ha escrito El principio de incertidumbre, así que si les gustan estas novelas que enganchan a modo de thriller, que nos mantienen en tensión desde el principio, tienen una cita con la entrevista que tenemos a continuación porque, gracias a Dios, este espacio nos permite conversar con sus autores y esto nos enriquece muchísimo.

Así que vamos a hablar con Sonia Guillén, que está al otro lado del teléfono.

Sonia, buenos días.

Hola, muy buenos días.

¿Cómo estás? Muy bien, muy contenta de estar aquí con vosotros.

Bueno, es que de verdad yo lo considero que es una suerte el poder hablar con los autores para que nos desveléis un poquito el porqué de la trama, sin querer tampoco llegar muy allá, que lo bueno de obras como la tuya es que enganchan y te tienen ahí entretenido hasta la última página, porque detrás está la historia, en este caso, de un asesino en serie que está obsesionado por la física cuántica.

De ahí lo del título, El principio de incertidumbre, ¿verdad? Sí, exacto.

Es una idea que se me ocurrió leyendo sobre física cuántica, ¿qué pasaría si alguien creyera que esto se puede aplicar a personas? Y de ahí surgió la idea de este libro.

Claro, es una idea que tienes, pero que entiendo que da más dificultad a la hora de desarrollar la trama, ¿no? Porque la física cuántica es el móvil que lleva a un asesino a cometer sus crímenes.

Sí, totalmente, pero no habla tanto de física cuántica, es un libro para todos los públicos, es más, yo creo que es para más personas de letras puras que no de ciencias.

Pero sí, claro, fue más complejo documentarse y oir la trama, incluyendo estos conceptos, ¿no? Sí, sí, sí.

Bueno, yo leí del comienzo del libro, es el punto de partida, porque todo tiene que ver con esta pintora, ¿verdad? A ver cómo lo hacemos sin dar demasiadas pistas.

Siempre lo digo aquí cuando hablo con los autores, digo, a ver qué podemos decir que hay oyentes a los que no les gusta absolutamente, vamos, que no les digan absolutamente nada del argumento.

Exacto, es que es muy difícil en un tráiler, tienes que ir con mucho cuidado.

Sí, aquí lo que yo creo que podemos decir es que hay un asesino que está obsesionado con reproducir estos experimentos y para ello escoge a personas que para él viven en superposición.

¿Qué significa? Lo que le interpreta es que o tienen una doble vida o esconden un gran secreto.

Sí, sí.

Y entonces son esas víctimas las que le escogen.

Sí, sí, sí.

Claro, está muy bien porque al final tiene mucho que ver con lo que es el ser humano, ¿no? Esa dualidad, ¿no? A veces uno suele esconder más de lo que muestra.

Sí, exacto, en la física cuántica dice que las partículas se comportan de una manera o de otra según las observamos o no y a mí eso me llevó a pensar que las personas también somos así, ¿no? No somos iguales, no estamos igual en casa que fuera y luego ya no hablamos de personas con vidas muy ocultas o muy complejas que pueden dar una imagen y ser auténticos monstruos, ¿no? Totalmente.

En su intimidad.

Sí, sí, sí.

Claro, Sonia, fíjate, esto nos pasa cuando conocemos, y me voy al plano real, ¿no? Pues alguna noticia que nos sorprende muchísimo y que tiene que ver a lo mejor con personas a las que los vecinos querían conocer, cometen un asesinato y dicen, pero bueno, no me hubiera imaginado, ¿no? Que fuese capaz de cometer ese crimen, esto lo escuchamos un montón de veces cuando vemos las noticias.

Sí, es algo que siempre nos golpea, ¿no? Cuando ves y dices, ostras, estas personas eran vecinos o cenaban con sus familias después de haber hecho un acto terrible, ¿no? Esto siempre como personas nos llega hasta, nos duele, ¿no? Claro, claro, sí, sí.

Porque decimos, ¿no? ¿Hasta qué punto? ¿No? Conocemos a las personas de nuestro entorno con las que quizá nos cruzamos por la mañana, ¿no? Y les damos los buenos días.

Y yo estaba pensando otra cosa muy importante, ¿no? Que tiene que ver con esto que comentamos, y es que esta es una sociedad...